El humo que salía de la rejilla del establecimiento, que había cerrado minutos antes, ha permitido dar la voz de alarma y facilitar una rápida intervención.
Los organizadores de las fiestas han denunciado que se ha registrado una "agresión sexista de alta intensidad" contra la que han protestado los vecinos del barrio.
UPN y PSN denuncian la permisividad de Asirón y le exigen la retirada inmediata de carteles en favor de los terroristas colocados en varios puntos del barrio, incluyendo un colegio.
Unas jóvenes compañeras de piso no salían de su asombro ante los 'nuevos inquilinos' que tuvieron que ser desalojados por una patrulla de la Policía Municipal.