Ya se nota en Pamplona que los Sanfermines están de vuelta. A solo dos días de que resuene el chupinazo en la capital de Navarra, las calles se van llenando de ambiente.
Y como no podría ser de otra forma, los puestos de venta ambulante también han vuelto tras dos años de parón. Uno de ellos, el de la esquina de Correos en el Paseo Sarasate, ya está preparado para recibir a los turistas.
Prudencia Santana Holguín, dueña de este famosos puesto, cuenta que llevan viniendo a Pamplona desde 1995. ''Somos ya la tercera generación en venir a los Sanfermines''.
Natural de Badajoz, Prudencia se casó con su marido, heredero del puesto ambulante, y ahora es la que se encarga del negocio.
La idea de venir a Pamplona a vender en Sanfermines fue de unos amigos de la familia, que les convencieron de que era fácil vender en la capital foral. ''El puesto empezó en Sarasate, luego nos movieron a la Taconera y aquí hemos terminado'', comenta Santana.
En cuanto al nivel de venta, han notado en los últimos años una bajada en el número de personas que vienen a Pamplona durante los Sanfermines.
''El problema es que la gente que viene a Pamplona ha notado que los precios han ido subiendo y esa es la imagen que se ha creado de la ciudad fuera'', asegura Prudencia.
''Ya no hay tanto mexicano y francés como antes'', explica la dueña del puesto. ''Los que nunca fallan son los ingleses''. Entre los compradores españoles, los catalanes y valencianos son los más
Por otra parte, Prudencia contaba que los productos más vendidos siguen siendo los de siempre, ''los pañuelos, las fajas y las camisetas, todos con toros''.
Finalmente, la dueña del conocido puesto ambulante asegura que este tipo de puestos no solo son un comercio más, sino suman como punto de información para los turistas que están perdidos.
''Cuando vienen a preguntar por la plaza de toros o el ayuntamiento, nosotros les guiamos y explicamos'', explica Prudencia. ''Hemos aprendido hasta inglés'', comenta con una sonrisa.
