Pamplona presenta una economía saneada y sus cuentas de 2022 expresan "la imagen fiel del patrimonio, situación financiera y los resultados económicos del ejercicio". Así lo asegura la Cámara de Comptos en el informe sobre las cuentas del Ayuntamiento de Pamplona justo 13 días de que el PSN facilite la alcaldía a Bildu mediante una moción de censura en el denominado 'pacto de las capuchas'.
El informe señala que el Ayuntamiento de Pamplona y sus organismos autónomos gastaron el año pasado 251 millones e ingresaron 270. En gastos, destacan los de personal con 107 millones, los bienes corrientes y servicios con 82 millones y las inversiones, que el año pasado sumaron 31 millones.
La plantilla orgánica del ayuntamiento tiene 1.624 puestos de trabajo de los que 595 están vacantes. De estos últimos, 477 se han cubierto a través de contrataciones temporales. Por tanto, a finales de 2022 el Ayuntamiento de Pamplona contaba con 1.506 empleados, con una tasa de temporalidad del 32%. Para disminuir dicha tasa, está en marcha una oferta de empleo de estabilización con 265 plazas.
Respecto a los ingresos, las transferencias corrientes del ayuntamiento ascendieron a 112 millones; los impuestos directos sumaron 61 millones y las tasas y precios públicos 26 millones.
El informe subraya que en 2022 el ahorro bruto descendió respecto al ejercicio anterior, pasando de 29 millones a 22. La razón fue el aumento de los gastos de funcionamiento, es decir, los gastos de personal, bienes corrientes y transferencias corrientes, que pasaron de 193 a 208 millones.
El remanente de tesorería para gastos generales suma 36 millones, de los que 15 corresponden al endeudamiento concertado en 2022. Destaca el informe el importe de gastos, tanto corrientes como de capital, financiados con remanente de tesorería (14 millones), con la consiguiente reducción del mismo.
A la vista de estos datos, la Cámara de Comptos concluye que la situación financiera del Ayuntamiento de Pamplona es saneada, ya que genera recursos suficientes para atender sus gastos de funcionamiento y la carga financiera.
Respecto a la opinión de auditoría financiera, el informe señala que la cuenta general de 2022 expresa la imagen fiel del patrimonio, situación financiera y los resultados económicos del ejercicio. La opinión de legalidad también es positiva con alguna salvedad referida a prestaciones soportadas en contratos vencidos, con un gasto de 21 millones, y a la obra de refuerzo de la pasarela.
El informe señala que al Ayuntamiento de Pamplona le han concedido 28 millones de los fondos europeos Next Generation, de los que ha cobrado 13. A 31 de diciembre del año pasado, el ayuntamiento había gastado 10 millones. La mayor parte de dicha inversión (6,5 millones) se ha destinado al proyecto “Pamplona avanza”, un conjunto de actuaciones estratégicas para cambiar el modelo de movilidad, mejorar su calidad ambiental e incrementar la competitividad de la ciudad.
El informe también analiza la obra de la pasarela del Labrit. Señala que dicha obra, con un coste de 644.000 euros, se puso en funcionamiento en enero de 2011. Los problemas de seguridad detectados hicieron que se cerrara en septiembre de 2016. Así permaneció hasta octubre de 2023, tras la obra de refuerzo de la misma. Dicha obra de refuerzo se adjudicó por 594.000 euros. Tras varias modificaciones y obras complementarias el coste total superó ligeramente el millón de euros, con una desviación del 78%. Si al precio de la obra se le suman los informes, redacción del proyecto, dirección de obra y andamiaje, el coste total de la rehabilitación de la pasarela suma 1,6 millones.
La Cámara de Comptos constata que la exigencia de responsabilidades se ha dilatado en el tiempo y que el ayuntamiento ha reclamado 1,6 millones en concepto de indemnización por defectos de la pasarela. De esa cantidad, solo ha recibido 140.000 euros.
El informe recomienda analizar el proyecto de la obra de rehabilitación para, en su caso, reclamar a su redactor la indemnización correspondiente por los posibles defectos, insuficiencia técnica, errores materiales u omisiones.
La Cámara de Comptos aconseja también potenciar el control interno de la intervención, planificar la licitación de los contratos antes de su vencimiento y aprobar la ponencia de valoración que fije el valor de los inmuebles municipales.
