• jueves, 02 de mayo de 2024
  • Actualizado 20:45
 
 

SUCESOS

Se les va de las manos: brusco final a una fiesta de la noche de Reyes en Pamplona

La Policía Municipal desalojó el local y procedió a identificar a uno de los responsables de la fiesta para elevar la propuesta de sanción.

Imagen de varios jóvenes bailando en una fiesta en una discoteca ARCHIVO
Imagen de varios jóvenes bailando en una fiesta en una discoteca ARCHIVO

Era de prever que cayendo las cabalgatas del día 5 de enero en viernes, la fiesta se prolongara hasta altas horas. Lo que no sospechaban los vecinos del barrio de la Chantrea, en Pamplona, es que iban a terminar llamando a la Policía Municipal para que pusiera punto y final a una fiesta que varios jóvenes protagonizaban en una bajera del mencionado barrio.

Según relata la Policía Municipal de Pamplona, a las 6:24 de la mañana del seis de enero se recibió la llamada de un vecino asegurando no poder más. Decía que no había podido dormir en toda la noche por una fiesta que se estaba desarrollando en la bajera de su edificio ubicada en la calle Cendea de Iza y que, aunque había tratado de ser comprensivo, los ruidos, en lugar de decrecer habían ido a más, no sólo por el volumen de la música que salía de la bajera, sino también por las molestias que los jóvenes ocasionaban al entrar y salir del local.

Una patrulla se personó en el lugar y -efectivamente- comprobaron que la música se encontraba a un volumen considerable y que había mucha gente en el interior, y que la fiesta se les había ido de las manos.

Los agentes procedieron al desalojo de la bajera contando hasta 55 personas en su interior, lo que superaba ampliamente el aforo legal permitido.

A eso se le añade que el uso de bajeras está regulado en Pamplona por una ordenanza municipal que obliga a su cierre a las 2:30 de la madrugada, suponiendo en este caso otro incumplimiento más.

Los agentes identificaron a uno de los responsables del alquiler de la bajera y elevó la correspondiente propuesta de sanción. Eso sí, según destaca la Policía Municipal, el trato fue en todo momento respetuoso y colaborador por parte de los jóvenes que vieron como la fiesta terminaba de manera brusca y con una multa a la que ahora tendrán que hacer frente.

La Policía Municipal de Pamplona ha informado de que esa misma madrugada del día seis de enero se denunció a otros dos establecimientos de hostelería por incumplimiento del horario de cierre; uno en el casco viejo y otro en el barrio de San Juan.


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