• viernes, 26 de abril de 2024
  • Actualizado 00:00
 
 

SALUD

¿Qué tomo paracetamol o ibuprofeno? Las recomendaciones médicas para cada caso

Ambos fármacos cuentan con semejanzas, pero tienen diferentes indicaciones e interacciones que pueden afectar negativamente a la salud.

Imagen de archivo de varias cajas de pastillas. ARCHIVO.
Varias cajas de pastillas. ARCHIVO

Ibuprofeno y paracetamol se han convertido en los medicamentos ‘estrella’ de todo botiquín, pero las dudas entre cuál de ellos elegir para cada caso hacen que en muchas ocasiones no se tomen de la manera adecuada ni las dosis indicadas.

Parece que la fórmula de ‘ensayo-error’ no es la mas adecuada cuando sufrimos un dolor de cabeza, tenemos fiebre o nos molesta la espalda y, en muchos casos, la costumbre nos hace decantarnos por uno u otro medicamento para tratar la dolencia.

Ambos cuenta con semejanzas, pero tienen diferentes indicaciones e interacciones. Eso sin contar con los variados efectos secundarios que pueden provocar. Conocerlos bien puede ayudar a mejorar nuestra salud.

 

EL IBUPROFENO

El ibuprofeno se convirtió ya en 2017 en el décimo fármaco más vendido del año en España con 14 millones de envases.

Este medicamento forma parte de la familia de los denominados antiinflamatorios no esteroideos (AINEs) y su uso está indicado para bajar la fiebre, reducir la inflamación y aliviar el dolor.

De esta manera, los profesionales del laboratorio navarro CINFA recomiendan el ibuprofeno para tratar aquellos estados de dolor leve o moderado asociado a dolores menstruales, músculo esquelético, dolor óseo, así como la fiebre alta y las inflamaciones con origen reumático.

Respecto a las dosis, CINFA señala que la mayoría de las dolencias pueden tratarse con el formato de 400 miligramos, en lugar de los 600 mg que es la dosis que más habitualmente se dispone en casa a pesar de que ahora es necesaria receta para su adquisición.

En este sentido, los profesionales de Salud señalan que en dosis iguales o menores a 1.200 mg pueden aparecen algunos efectos secundarios, especialmente gastrointestinales.

 

PRECAUCIONES CON EL IBUPROFENO

La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) alertó ya en 2015 que el consumo de ibuprofeno en dosis elevadas aumentaba el riesgo cardiovascular, por lo que se desaconseja su uso en personas con cardiopatías, insuficiencia cardiaca, enfermedad arterial periférica o cerebrovascular.

Asimismo, el consumo de ibuprofeno no debe hacerse con el estómago vacía, ya que puede irritar la mucosa. Por eso, se recomienda tomarlo junto a alimentos y evitarlos en aquellas personas que padecen dolencias estomacales o úlceras gástricas.

Tampoco debe ser ingerido por aquellos que estén tomando otros fármacos como otros antiinflamatorios no esteroideos, anticoagulantes, etcétera. Los pacientes con ciertas patologías, como insuficiencia renal o hepática grave, los que sufren asma o los que toman fármacos contra la tensión alta también deben tener especial cuidado con su consumo y es preciso preguntar a cualquier profesional de la Medicina.

Además, este medicamento no está recomendado en bebés menores de seis meses y es necesario prestar atención en el resto de los niños. En el caso de las mujeres embarazas, estas tienen que consultarlo con su médico y, en general, no se recomienda durante el embarazo y está contraindicado en el tercer trimestre de la gestación.

 

EL PARACETAMOL

Si el ibuprofeno ocupaba la décima posición en el ranking de medicamentos más vendidos en España, el paracetamol escala hasta la segunda posición, vendiéndose unos 38 millones de envases en las farmacias.

Este fármaco es capaz de aliviar el dolor y bajar la fiebre, por lo que cuenta con propiedades analgésicas y antipiréticas, que lo hacen un medicamento eficaz para combatir la gripe o moderados dolores de cabeza, lumbagos o dolor de huesos.

En el caso del paracetamol, este fármaco no causa efectos secundarios que afectan al estómago por lo que se puede tomar solo o con alguna bebida como agua, zumo o leche.

Tarda aproximadamente 45-60 minutos en hacer efecto, que suele durar unas cuatro horas. Según los expertos de CINFA, señalan que su consumo debería ser cada ocho horas, aunque puede reducirse en casos excepcionales a seis horas.

Dosis de 500 o 600 mg suelen ser suficiente para mitigar dolores y fiebre, aunque también se dispensa en dosis de un gramo. Eso sí, nunca se debe sobrepasar la dosis máxima fijada en 4 gr al día.

En el caso de bebés y niños pequeños, la dosis exacta de paracetamol depende del peso. Además, suele administrarse en gotas. También, en caso de tener problemas para que los niños ingieran el paracetamol, existe la opción de aplicar supositorios por vía rectal.

Los niños más mayores, a partir de los 34 kilos de peso, pueden utilizar la presentación de paracetamol de 500 mg. El pediatra indicará la dosis adecuada.

 

PRECAUCIONES CON EL PARACETAMOL

Las dosis elevadas de paracetamol pueden ser tóxicas para el hígado por lo que pueden aparecer mareos, diarrea, somnolencia, vómitos… Si no se trata, el daño hepático puede llevar al coma y a la muerte.

Para no tener estos efectos secundarios es de vital importancia respetar las dosis de paracetamol de 500-600 mg cada ocho horas.

A pesar de no provocar malestar estomacal, una dosis demasiado elevada de paracetamol puede resultar tóxica para el hígado. En este caso, inicialmente, pueden aparecer vómitos, diarrea, mareos, somnolencia, pérdida de apetito y dolor abdominal. Si no se trata, el daño hepático puede llevar a un coma o, incluso, a la muerte.

Para evitar estos efectos secundarios y dañar nuestro hígado, no hemos de exceder la dosis máxima recomendada de paracetamol de 500-600 mg cada ocho horas. También deben abstenerse de tomarlo las personas que sufren insuficiencia hepática o tomarlo a las dosis establecidas por el médico, así como aquellas personas con anemia o que tienen problemas con el alcohol. También hay que ajustar las dosis en pacientes con insuficiencia renal.

En cambio, al contrario de lo que sucede con el ibuprofeno, el paracetamol sí puede tomarse durante el embarazo, siempre que esté justificado, si bien hay que recordar que, para cualquier fármaco, el riesgo cero no existe.

 

¿CUÁNDO TOMAR IBUPROFENO Y CUÁNDO PARACETAMOL?

En general, tanto el ibuprofeno como el paracetamol se consideran medicamentos seguros si se usan en las dosis y los periodos de tiempo recomendados.

A la hora de decantarnos por uno u otro, una de las claves puede ser la inflamación y la intensidad del dolor.

En caso de que esta exista, y el dolor sea intenso puede ser preferible tomar ibuprofeno; si no, el paracetamol podría ser el más indicado.

Por ejemplo, el ibuprofeno se suele recomendar en el caso de lesiones provocadas por golpes o esguinces, así como para dolores menstruales intensos, musculares o de las articulaciones.

También suele ser recomendado para paliar el dolor cuando este se vuelve más agudo dentro de procesos crónicos.

En el caso de que haya fiebre, pero no dolor, puede ser suficiente tomar paracetamol. Pero si, por ejemplo, a la fiebre se suma dolor de garganta, se controla mal con paracetamol, y si se asocia fiebre con inflamación, se podría valorar optar por el ibuprofeno.

Si  queremos mitigar los síntomas de la resaca, lo mejor es no tomar ni ibuprofeno ni paracetamol: en este caso, lo mejor es beber agua para rehidratar nuestro organismo, seguir algunos consejos dietéticos como mencionamos en este artículo y, al mismo tiempo, no sumar a nuestro malestar daños en el estómago o el hígado.


  • Los comentarios que falten el respeto y que no se ciñan al tema de la noticia, podrán ser eliminados.
  • Cada usuario será el único responsable de sus comentarios.
¿Qué tomo paracetamol o ibuprofeno? Las recomendaciones médicas para cada caso