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SOCIEDAD

La iglesia de San Francisco Javier fue inaugurada en Pamplona en el día de su santo

El templo abrió sus puertas el 3 de diciembre de 1952 y coincidió con una visita del jefe del Estado en aquel momento. 

Iglesia de San Francisco Javier de Pamplona. MIGUEL OSÉS
Iglesia de San Francisco Javier en Pamplona. MIGUEL OSÉS

La iglesia de la parroquia de San Francisco Javier en Pamplona ha cumplido 69 años este 3 de diciembre de 2021. Está situada en la esquina de la calle Olite y la actual avenida de la Baja Navarra. Fue erigida canónicamente en el mes de marzo de 1940, junto a la de San Miguel en la Plaza de la Cruz, para atender a todos los vecinos de esta zona del segundo ensanche que estaba en construcción y en pleno desarrollo urbanístico.

Su primer párroco fue Jacinto Argaya, más tarde fue obispo de San Sebastián, que la dirigió hasta el mes de febrero de 1943 cuando le sucedió José Manuel Pascual, que ejerció su función pastoral durante cuatro décadas. Durante doce años la parroquia ejerció el culto en una bajera del número 30 y 32 y posteriormente en el número 38 de la entonces Avenida de Franco, hoy Baja Navarra.

La primera piedra del nuevo templo fue bendecida el 24 de junio de 1951 y las obras duraron once meses, que en realidad fueron nueve al estar paradas dos meses. El arquitecto fue Joaquín Gortari Beiner que llevó a cabo una obra original uniendo un criterio artístico renovador con una innegable monumentalidad.

Además, en un rasgo de generosidad, Gortari dejó el monto de sus honorarios a beneficio de la iglesia. El constructor Fue Félix Huarte, que adelantó el dinero de la obra, y más tarde sería vicepresidente de la Diputación Foral Navarra. Trabajaron en la construcción unos 160 obreros de los cuales uno falleció en accidente laboral. La carpintería Borda, los pintores Hermanos Iribarren y Casa Altuna con el mármol fueron también protagonistas de la obra.

La imagen del santo navarro que preside la iglesia, de 3,20 metros de altura, fue obra del escultor granadino Eduardo Carretero y fue costeado por suscripción entre los Javieres de Pamplona. El mismo escultor fue el autor de las figuras de los cuatro evangelistas colocadas a los dos lados del altar mayor, así como los retablos de relieve de los altares laterales.

El pintor Sánchez Cayuela representó distintas facetas de la vida, predicación y muerte del santo. Las vidrieras y el famoso rosetón de la fachada principal fueron ejecutadas por la prestigiosa firma Maumejean, maestra en esta clase de trabajos. El órgano fue construido por la Organistería Española, dotado de 500 tubos, fue regalo de la feligresía.

Maqueta de los viajes de San Francisco Javier en Pamplona. NAVARRA.COM
Maqueta de los viajes de San Francisco Javier en la iglesia que lleva su nombre en Pamplona. NAVARRA.COM

La inauguración del templo tuvo lugar el 3 de diciembre de 1952, con la asistencia del entonces Jefe del estado Francisco Franco. También acudieron los ministros Martín Artajo, Ruiz Jiménez. Conde Vallellano y Fernández Cuesta. También estuvieron presentes otras autoridades como ocho arzobispos y obispos y el Ayuntamiento de Pamplona con toda su comitiva.

El motivo de la visita de Franco y su amplio cortejo de ministros y autoridades se debió, sobre todo, a la inauguración del Monumento a Los Caídos que tuvo lugar al día siguiente, 4 de diciembre de 1952. Acudieron todas las autoridades navarras y la plaza, ahora llamada de la Libertad, se llenó de pamploneses para ver al ‘Caudillo’.

La casa parroquial se continuó levantando durante 1953 y el primer trimestre de 1954. Tras ello se remataron detalles pendientes en el exterior del templo como el pórtico de la fachada principal y el bajorrelieve del acceso que da a la avenida entre mayo y agosto de 1954. Con ello se finaliza el proceso constructivo de la iglesia y la casa parroquial.

Tenía una estimación coste de ocho millones de pesetas en su diseño inicial y recibió críticas por parte de vecinos y clero que consideraban estaba ‘falto de monumentalidad y clasicismo’. Finalmente las cuentas se elevaron a más de catorce millones de pesetas que fueron sufragados en más de un 21% por el estado y por donativos el restante​ que se pagaron durante los doce años siguientes.

El centro parroquial, la tercera parte restante, se levantó en año y medio, entre 1966 y 1968 con un coste inicial superior a los once millones. Entre sus dotaciones previstas y creadas estaba un bar y el cine Xavier. Félix Huarte terminó finalmente por aportar unos siete millones y medio de pesetas.

Como curiosidad, en el interior actual de la iglesia se levanta una maqueta a escala del Castillo de Javier ante un mural, un mapamundi, donde se muestran los viajes del misionero que San Francisco de Javier realizó por todo el orbe.

Esta maqueta, como reza en la placa, es obra de María Pilar Gómara y de José María Tabar. Pilar Gómara recibió por su labor en favor del belenismo, la Medalla de Oro de la Federación Española de Belenistas.


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La iglesia de San Francisco Javier fue inaugurada en Pamplona en el día de su santo