No existe ninguna duda de la cercanía y la relación de Koldo García Izaguirre con los círculos de poder del socialismo. No sólo en Madrid, de la mano del ex ministro José Luis Ábalos, quien le colocó al frente de importantes sociedades públicas sin tener ningún tipo de preparación para ello, sino también en Navarra, donde la cercanía a la cúpula del PSN le sirvió para atraerse el favor de quienes hoy mandan en el socialismo navarro: Santos Cerdán, María Chivite y Ramón Alzórriz.
La imagen que ilustra este texto es lo suficientemente elocuente para demostrar cómo el triunvirato de poder socialista en Navarra es abrazado por la presunta corrupción de un Koldo García, a quien en 2015 María Chivite introdujo en su lista al Parlamento de Navarra. En aquella lista figuraba también en el puesto 29 Patricia Úriz, la mujer de Koldo García, que también fue detenida en la denominada operación Delorme.
Tras su detención a comienzos de semana, el socialismo se ha echado las manos a la cabeza. Alguno incluso se ha sorprendido. Otros han tratado de quitarse de en medio. La líder socialista, María Chivite aseguró que no tenía nada que opinar porque no era un afiliado socialista. Algo que es complicado de demostrar. Desde luego, Chivite no ha demostrado que no fuera afiliado y se ha limitado a decir que no lo era porque había dejado de pagar las cuotas. Pero lo que es un hecho palmario es que representó al partido del puño y la rosa en el Ayuntamiento de Huarte y que llegó a las altas esferas de poder en España porque tenía carnet de afiliado.
Santos Cerdán, secretario de Organización del Partido Socialista Obrero Español, y que presume de que en su partido no se mueve nadie sin que él lo sepa, fue el encargado cuando ejercía únicamente en la sede del Paseo Sarasate, no sólo de ponerle en las listas de Huarte, donde llegó a ser concejal de Industria, sino también de proponérselo a María Chivite para las listas al Parlamento.
Parece que bastó con llevarlo en el puesto de suplente, aunque a su mujer, Patricia Úriz, la incluyó en la Ejecutiva socialista como vocal de Bienestar Social. Ella, también detenida ahora, parece ser que sí seguía abonando su cuota de militancia. Al menos eso se desprende de su expulsión de facto del partido socialista. Pese a todo, se hace un poco extraño que Koldo no pagara las cuotas y su mujer sí...
El desembarco de Koldo en Madrid vino del hoy muy sorprendido Santos Cerdán. De hecho, en las imágenes televisivas del de Milagro llevando a la sede de Ferraz los avales para que Pedro Sánchez se presentara a la secretaría general del PSOE, aparece Koldo. Es más, el propio Sánchez dijo de Koldo García que era "el último aizkolari socialista". "Pamplona nos descubrió a uno de los gigantes de la militancia en estas tierras navarras. No obstante, este guerrillero de grandes dimensiones físicas y corazón comprometido, es un referente político en la lucha contra los efectos de la crisis y las políticas de la derecha", dijo de él entonces Sánchez.
Fue Santos Cerdán quien le presentó a José Luis Ábalos y los tres formaron el núcleo duro y más cercano a Pedro Sánchez en aquellos convulsos años del socialismo en España. De ahí, ya se conoce su fulgurante y meteórica carrera ascendente siempre a la sombra del entonces ministro de Transportes. De chófer y escolta a asistente personal. Y de ahí, y sin ninguna preparación, a ser nombrado consejero delegado de Renfe, o a recibir junto a Ábalos a la vicepresidenta de Venezuela Delcy Rodríguez, en Barajas, cuando lo tenía prohibido.
El premio gordo llegó cuando su mujer, Patricia Úriz, persona de confianza de María Chivite y Santos Cerdán, fue contratada a dedo -como no- en el Ministerio de Transportes de Ábalos. Así, mientras su marido presuntamente hacía y deshacía con la compra de mascarillas, con el ministerio como aval, buscaba administraciones socialistas para vender muy por encima del precio de mercado las demandadísimas mascarillas.
Así, sin tener que presentarse a una oposición, accedía a un puesto de nivel 17 dentro del ministerio, el más alto al que podía optar por su preparación académica.
Ahora la Fiscalía Anticorrupción lo tiene claro y sitúa a Koldo García como la persona a la que usaban para "agilizar" trámites con el Ministerio de Transportes en la contratación durante la pandemia para la venta de mascarillas, en concreto facilitando los procesos de adjudicación de material sanitario a la empresa Soluciones de Gestión.
El juez recoge a su vez los apuntes de Anticorrupción sobre el "notable incremento" del patrimonio de Koldo en los años posteriores a la venta del material quirúrgico. En concreto, la Fiscalía considera que ese dato "sumamente relevante y revelador" muestra en realidad el papel que "pudo desempeñar en la adjudicación, pudiendo haber hecho uso de terceras personas próximas a su círculo familiar con la posible finalidad de ocultar, o al menos dificultar, la verdadera titularidad de los inmuebles adquiridos". Cabe recordar que su hermano, Joseba, también fue detenido por la Guardia Civil.
Así, la Fiscalía apunta que entre 2020 y 2022 Koldo pasó a ser titular de bienes cuyo valor podría alcanzar una cifra total de 1,5 millones de euros. "Estas adquisiciones se producen apenas cinco meses más tarde de que tuvieran lugar las adjudicaciones públicas a la empresa Soluciones de Gestión".
Resulta curioso que ahora Santos Cerdán se limite a decir un "lo conozco de los tiempos de Navarra" como si no decidiera nada en Pamplona, a la vez que intenta mirar para otro lado -el del hermano de la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso- para tratar de desviar la atención de un Koldo, a quien ayudó a trepar por la escala socialista, y del que ahora, sin decirlo, reniega, no sea que vaya a salpicar algo.
