Geroa Bai no ha acudido este miércoles, como ya anunció, a la reunión convocada por el PSN para intentar avanzar en las negociaciones de un posible Gobierno en la Comunidad foral. Los socialistas habían citado a las 10 horas en el Parlamento a la coalición nacionalista y a Contigo Navarra, pero tan solo ha acudido una delegación de esta última formación, encabezada por Begoña Alfaro.
Geroa Bai ya explicó este martes que "hasta que el PSN no cumpla el compromiso" adquirido de "aclarar", en una reunión bilateral, el papel institucional de cada socio en la legislatura, es decir, el reparto de sillones en el Gobierno de Navarra, no iban a reunirse 'a tres' en una negociación. Por la misma razón, tampoco acudió a la reunión convocada por los socialistas la semana pasada.
El trasfondo de la cuestión es que Geroa Bai quiere conocer, antes de comenzar a negociar un programa de gobierno, cuántos departamentos y en qué competencias tendrá en ese futuro gobierno. Los nacionalistas vascos quieren mantener el número de consejerías de la legislatura pasada, algo a lo que se oponen los socialistas por considerar que Geroa Bai ha perdido fuerza en las urnas obteniendo dos escaños menos que en 2019, de manera que su peso en el Gobierno de Navarra debería ser menor.
Es decir, se trata de un problema de reparto de sillones, más que una insalvable desavenencia política o programática que está llevando a Uxue Barkos a tensar la cuerda.
Consciente de que Geroa Bai no iba a acudir a la reunión, Chivite ha decidido no presentarse tampoco, haciéndole el feo a Contigo Navarra, y ha enviado al encuentro a la parlamentaria Ainhoa Unzu, el secretario de Organización, Ramón Alzórriz, y Jorge Aguirre, secretario de Acción Electoral. Por Contigo Navarra, han asistido, junto a Begoña Alfaro, el parlamentario Carlos Guzmán, el parlamentario Daniel López, María Eugenia San Martín y Miguel Garrido.
Para evitar captar imágenes del encuentro a tres pero sin uno de los partidos convocados y sin la que se postula como presidenta, los socialistas han impedido el acceso de la prensa gráfica a la sala en los prolegómenos de la reunión, como suele ser habitual, aferrándose a que "no había habido una convocatoria institucional de la reunión".
