Mi mayor de los respetos y reconocimiento a ambos, pues son de esos entrenadores trabajadores silenciosos que no ocupan espacios periodísticos ni grandes titulares.
- domingo, 28 de abril de 2024
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Este partido va dedicado a los dos entrenadores, Mendilibar y Arrasate. Mi mayor de los respetos y reconocimiento a ambos, pues son de esos entrenadores trabajadores silenciosos que no ocupan espacios periodísticos ni grandes titulares, pero honrados en su trabajo hasta más no poder: un abrazo a los dos.
Este Osasuna – Sevilla llega en un momento difícil para ambos por los puntos conseguidos hasta este momento por ambos conjuntos. Un Osasuna que quiere ganar en casa y un Sevilla que no quiere descolgarse por abajo: difícil papeleta para todos.
Osasuna se planta en el campo, dando a entender desde el inicio que quiere ir a por todo y sin miedo; con una alineación de salida muy reconocible, con el triángulo en el centro de Torró, Aimar y Muñoz.
Que se tienen respeto los equipos ha quedado claro desde el comienzo y se adivinaba que la victoria vendría por algún error de unos u otros, que no por la elaboración de juego de ataque; en Osasuna se siguen viendo indecisiones defensivas que la temporada pasada no se daban. Primera parte insulsa si exceptuamos una ocasión clara para cada equipo, especialmente la del Chimy.
Estaba claro el partido se jugaba a ver quién disputa el balón más y mejor para no hacer concesiones al contrario; el poco juego que elabora Osasuna es pasando por Aimar y alguna llegada del Chimy. Para llegar en condiciones de hacer gol, Osasuna ha de tener un poco más de paciencia y pausa en el centro del campo, y contra el Sevilla no lo ha tenido.
Los cambios, especialmente la entrada de Barja, ha dado un poco más de picante a su banda y en algún momento ha podido sorprender al equipo andaluz. Sólo la emoción del resultado ha mantenido vivo el encuentro hasta el final, pero seguro que ambos entrenadores ya firmaban el empate desde el inicio.
En el campo se ha visto lo que, tanto Jagoba como Mendilibar, tenían en la cabeza antes de comenzar el encuentro, porque cada uno sabía lo que pensaba y quería el otro.
Los dos equipos han mostrado sus cualidades y sus carencias, las de Osasuna serenidad y pausa en la elaboración del juego, la agresividad y competitividad se le supone.
Y como decía el entrenador Boskov, punto ser punto.
AUPA OSASUNA
