Un hombre ha sido detenido este fin de semana en Pamplona después de protagonizar uno de los sucesos más curiosos de los acaecidos en la ciudad.
Pasaban las 2 de la madrugada del sábado al domingo cuando se recibió una llamada de unos vecinos de un inmueble del casco viejo de Pamplona asegurando que habían escuchado voces en la escalera y que creían que había personas intentando 'okupar' un piso.
La Policía Municipal de Pamplona envío una patrulla de agentes de paisano que accedieron al edificio. En su interior encontraron a una pareja que portaba unas llaves e intentaba abrir una de las viviendas.
Los jóvenes, que mostraban evidentes síntomas de haber ingerido importantes cantidades de alcohol, aseguraban que habían alquilado la vivienda para el fin de semana y que sólo querían entrar a dormir.
Los vecinos del inmueble aseguraban, por contra, que eso era imposible, porque esa vivienda en concreto, y todas las del edificio, tienen sus propietarios que residen de modo habitual en ellas, por lo que resultaba imposible que les hubieran alquilado la vivienda.
Los agentes de paisano trataron de hacer ver a los jóvenes que, tal vez, se habían equivocado de portal, y les conminaron a abandonar el edificio, a lo que estos se negaron.
Fue entonces cuando se identificaron como agentes del a Policía Municipal de Pamplona, que -recordemos- vestían de paisano. En ese momento, el hombre se revolvió, se puso violento y comenzó a agredir a los agentes, propinándole a uno un fuerte puñetazo.
Así pues, tuvo que ser reducido, esposado, y detenido por un delito de atentado contra la autoridad. El joven fue conducido a dependencias policiales y puesto en libertad tras declarar ante el juez de guardia.
