UGT Navarra ha calificado las acusaciones de ELA de "boicot y de sabotaje a cualquier posibilidad de acuerdo y de mantenimiento del diálogo social".
UGT y CCOO han atribuido las acusaciones del sindicato ELA, que aseguraba que ambos sindicatos pagaban las nóminas de algunos de sus liberados sindicales a través de convenios con el Servicio Navarro de Empleo, a "una campaña de desprestigio" y un "sabotaje" al "mantenimiento del diálogo social".
Así, en declaraciones a los periodistas, el secretario general de UGT en Navarra, Javier Lecumberri, ha calificado las acusaciones de ELA de "boicot y de sabotaje a cualquier posibilidad de acuerdo y de mantenimiento del diálogo social" y ha resaltado que "toda la información" que el sindicato nacionalista ha dado a conocer "es la misma que hemos publicado en la página web y que es de acceso público, como es nuestra obligación y porque no tenemos nada que ocultar".
Por su parte, el secretario general de CCOO Navarra, Raúl Villar, ha asegurado que son "absolutamente falsas" estas acusaciones y ha afirmado que son "una campaña de desprestigio de ELA al SNE y a las organizaciones sindicales que participamos en él", que "más parece una campaña que podría venir de la derecha más reaccionaria que de una organización de trabajadores". "Pretenden que en Navarra las políticas activas se dejen de ejecutar", ha afirmado Villar, que ha exigido a ELA que "deje esta campaña de acoso" y que "se dedique a dar gestión de lo que ellos hacen y que deje de atacar al sindicalismo de clase".
