• martes, 19 de marzo de 2024
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TERRORISMO

El asesino Patxi Ruiz pidió el alta del hospital porque quería volver a la cárcel para fumar y ver la televisión

El preso de ETA se encuentra en cuarentena y ha recibido estos días la visita de su madre, que ha llegado desde el País Vasco pese a que el estado de alarma impide viajar entre provincias.

El etarra Patxi Ruiz EL ESPAÑOL
El etarra Patxi Ruiz. EL ESPAÑOL

El preso de ETA Patxi Ruiz se encuentra en cuarentena de vuelta en la cárcel de Murcia II tras su breve paso por un hospital, donde se le diagnosticó una leve deshidratación debido a la huelga de hambre que inició a mediados de mayo y que ha desatado una campaña de sabotajes de grupos cercanos al sector más duro del colectivo de presos de la banda terrorista, mientras que en Pamplona ha conllevado la violencia diaria de grupos de jóvenes de la izquierda abertzale.

Según han informado fuentes conocedoras de la situación médica y en prisión del interno, Patxi Ruiz solicitó el alta voluntaria el viernes en torno a las 18 horas porque quería volver a la prisión para ver la televisión y poder fumar. Además, tras valorar los médicos que tenía una leve deshidratación, también ha empezado a beber.

El preso, asesino del concejal de UPN en el Ayuntamiento de Pamplona Tomás Caballero, se encuentra en la actualidad en el módulo específico de Murcia II para prevenir el contagio de coronavirus de Murcia. La protesta la inició a mediados de mayo presuntamente como queja por la gestión de la dirección del centro penitenciario para cumplir el protocolo común en todas las cárceles para evitar la propagación del virus.

Sin embargo, el movimiento Amnistia Ta Askatasuna (ATA), el sector círitco de la banda terrorista ETA, desveló que sus intenciones son completamente distintas. Ruiz, de 46 años, reclama media docena de peticiones, una de las cuales es su traslado a Euskal Herria junto al de los demás presos vascos. La gestión del coronavirus solo fue una excusa para movilizar a 80 presos el pasado 9 de mayo, según desveló el diario El Español.

Ruiz es un preso conflictivo e inestable (tiene un largo historial de sanciones y expedientes en la cárcel) que cumple condena por su participación en el asesinato de Caballero. Tras solicitar un informe la Audiencia Nacional por una queja de su abogada, estuvo solo unas horas en el hospital, donde fue trasladado el jueves a última hora de la noche en ambulancia y bajo custodia policial.

Su huelga de hambre ha sido reivindicada por un sector de la izquierda abertzale minoritario, pero enfrentado con la línea oficial, para lanzar una campaña a favor de los presos de ETA que incluye ataques a sedes de partidos y de viviendas particulares, como la de la líder del PSE, Idoia Mendia.

MÚLTIPLES INCIDENTES

Fuentes conocedoras de la situación de este preso señalan que su expediente en la cárcel cuenta con múltiples incidentes por plantes, insultos, coacciones y agresiones, incluso a otros internos. También tiene sanciones por introducir material prohibido.

Este etarra pamplonés, que ingresó en prisión por primera vez en 1996, es considerado un preso conflictivo e inestable emocionalmente, ignorado por otros internos de la banda terrorista que también cumplen condena en Murcia II.

Tras su protesta silenciosa en plena pandemia de coronavirus, que contó con apoyo de un grupo anarquista de Murcia, la dirección de la cárcel decidió cambiarlo de módulo, aunque enviándolo a otro que también es de respeto. Ruiz está clasificado en primer grado o régimen cerrado, por lo que tiene restringida su vida en prisión y duerme solo en una celda.

Además, este domingo se ha conocido, según ha publicado El Español, que la madre del preso, Elvira, y un médico de confianza han viajado desde el País Vasco a Murcia para ver al etarra, pese a que el estado de alarma impide este tipo de viajes entre provincias para evitar los contagios de coronavirus.

Ambos se personaron en el centro penitenciario Murcia II, situado en Campos del Río, aunque solo se permitió la entrada del médico, que pudo acceder al expediente médico de Ruiz. Su madre sí que pudo ver al etarra en el hospital. Ninguno de los dos ha sido multado por la policía por viajar entre provincias.


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