La empresa Conservas El Agricultor de la localidad navarra de Lerín celebra en 2023 sus 90 años de vida en uno de los mejores momentos de su historia tras haber reinventado por completo el formato de venta pero con un sistema de trabajo tradicional con el producto de la huerta de Navarra.
Especializados en embotar el mejor espárrago y pimiento de los campos de Lerín y sus alrededores, Conservas El Agricultor acaba de terminar la temporada del espárrago después de procesar 170.000 kilos de manera cuidadosa y muy familiar, para poder servir el mejor producto a todos sus clientes.
Fundada en 1933 por los abuelos del actual responsable de la empresa, Patxi Maestu Pellejeros, la empresa se reinventó en los años 90 y 2000 cuando comenzó el desembarco de los productos traídos de China o Perú, algo que golpeó con fuerza a decenas de conserveras de Navarra. Muchas de ellas echaron el cierre, hasta el punto de que en algunos pueblos e la Comunidad foral no ha quedado ninguna.
Sin embargo, el tesón de la familia, la experiencia, el conocimiento del sector y el amor por un trabajo de toda la vida ha permitido a Conservas El Agricultor afianzarse como una de las empresas conserveras punteras en Navarra que vende su producto de manera directa al consumidor final, sin pasar por intermediarios ni comercios o grandes superficies. Una llamada de teléfono, una visita a sus instalaciones o un pedido por mail o whastapp es suficiente para recibir en casa y al mejor precio los productos navarros tan demandados en muchos rincones de nuestro páis.
Basta pasar un rato en la sede de la empresa en Lerín, en Tierra Estella a 55 kilómetros de Pamplona, para comprobar el trajín de clientes que se mezclan con los agricultores, que llegan para entregar directamente el espárrago recién recogido por la noche y que en unos minutos será pelado a mano hasta terminar perfectamente embotado sin añadirle ni conservantes ni otros productos más allá de agua y sal.
El proceso es rápido y sencillo, pero a la vez es una cadena muy bien engrasada de personas, casi todas del mismo Lerín, que se afanan en seleccionar por categorías y tamaños los espárragos. Algo más de 40 personas trabajan cada año en Conservas El Agricultor en la campaña del espárrago que justo acaba de terminar ahora en junio y que comenzó a principios del mes de abril.
Tras el pelado y corte a medida de la lata, el espárrago pasa por un proceso de escaldado durante unos 4 minutos a 54 grados. El espárrago se queda todavía algo duro y es enfriado en unas duchas de agua, momento en el que las trabajadoras los van seleccionando según su tamaño, desde el más grueso hasta el más delgado. En la nave de Conservas El Agricultor muchas de las máquinas empleadas son las de toda la vida, como los pesos o las jaulas, todo siguiendo el estilo tradicional y natural.
Ya colocados los espárragos en sus latas, reciben el punto exacto de sal y agua, sin añadirles nada más, antes de cerrar el bote y pasar al proceso de esterilización y cocido del espárrago durante 21 minutos a 115 grados de temperatura. Esto permitirá que el espárrago se quede en su punto exacto y que se mantenga sin ningún problema durante más de 5 años perfectamente conservado. Toda una delicia para degustarlo en cualquier momento.
Los precios del espárrago en Conservas El Agricultor son bastante más económicos que en cualquier comercio supermercado, ya que venden directamente a cualquier persona que lo solicite. "Ahora mismo estamos ya en un 50% de venta en nuestra tienda y otro 50% con los pedidos online", explica con cierto orgullo Patxi Maestu sobre sus clientes, de los que destaca su fidelidad y exigencia para tener siempre la mejor verdura de Navarra.
El 1/2 kilo de espárrago se puede comprar entre 2,5 y 4,5 (según categoría), mientras que el pimiento se encuentra a entre 2,20 y 4,60 euros. La temporada del pimiento llegará a Conservas El Agricultor tras el verano y también serán los agricultores de la zona los encargados de recolectar y servir el manjar a la conservera local.
Este cambio de venta directa al consumidor final comenzó con el boca a boca de los clientes y poco a poco se ha ido extendiendo, ya que la empresa no cuenta con comerciales que lleven sus productos a ninguna otro comercio para su venta. La mayoría de clientes son de Navarra y País Vasco, las dos comunidades donde más les requieren. "Muchas familias vienen y se llevan espárragos, pimientos o menestra casi para todo el año. Aprovechan una excursión, comen en el pueblo y pasan un buen día", explica Maestu sobre sus clientes, que son los que realmente van a catar y degustar los espárragos 'cojonudos' de Navarra.
La conservera está ubicada en Lerín en la carretera Estella, 4 y en temporada alta del espárrago o del pimiento atiende prácticamente todos los días, incluidos los domingos. Esos festivos se cierran cuando no es campaña, pero los clientes no tienen que desplazarse hasta allí si quieren hacer su pedido.
Cuentan también con un sistema propio de reparto con el que entregar sus pedidos que les llegan bien por correo electrónico ([email protected]), bien con llamada telefónica al 948 53 00 31 o por Whastapp a ese mismo número de teléfono, un sistema que cada vez gana más terreno y que es el medio por el que recogen ya una cantidad importante de pedidos de sus clientes.
Quienes visitan la conservera de Lerín no sólo compran los dos productos estrella, sino que también tienen a sus disposición alcachofas o menestra, otros dos importantes productos muy demandados por los clientes. Hay también conservas de pescado (atún y bonito), encurtidos, verduras variadas como cardo, borraja, acelgas o puerros, todo embotado bajo la marca de garantía de Conservas El Agricultor.
Además, para conmemorar esta fecha tan especial de los 90 años, que han celebrado con una comida de empleados y agricultores, en Conservas El Agricultor han preparado una preciosa caja con la inscripción de la efeméride y que cuenta con una selección de los mejores productos, un buen regalo o un capricho que merece mucho la pena y que incluye, por supuesto, los famosos espárragos y pimientos que no pueden faltar en ninguna mesa.
