La iniciativa Herri Sanferminak ha decidido no instalar 'txoznas' en los próximos Sanfermines, algo de lo que ha responsabilizado al Ayuntamiento de Pamplona por su "actitud rígida" y "torpe gestión".
"Las y los impulsores de Herri Sanferminak estamos enfadados. El Ayuntamiento de Pamplona nos ha expulsado del Casco Viejo. Enrique Maya y su equipo quieren hacer volver los Sanfermines populares, del centro de la fiesta, al margen", han censurado en una rueda de prensa.
La iniciativa ha explicado que, tras organizar desde los Sanfermines 2016, durante 4 años, en el centro de la ciudad un programa de fiestas, ésta vez "no nos han dado más opción que movernos a la zona de Errotazar, al denominado parque de La Runa", opción que finalmente Herri Sanferminak ha decidido rechazar.
El colectivo ha criticado "la torpe gestión del Ayuntamiento". "Cuando el Ayuntamiento en otoño abrió el plazo para hacer propuestas, enviamos la propuesta de organizar el programa de Herri Sanferminak en las plazas O y Recoletas, manteniendo la dinámica de años anteriores. El Ayuntamiento se puso en contacto con nosotras en abril, sin tener en cuenta la propuesta enviada anteriormente. Durante ese tiempo, el contacto con los múltiples colectivos que somos agentes de los Sanfermines ha sido muy escaso. Tal y como denunciamos en marzo, sólo se han convocado dos reuniones de la mesa de San Fermín y en ellas, no ha habido lugar para la participación y el debate", ha afirmado.
Por otro lado, ha criticado "la actitud rígida del Ayuntamiento". "Tras la negativa de abril a los espacios solicitados, solicitamos una reunión para buscar alternativas. Allí, la actitud de los representantes del área de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento fue absolutamente rígida, inmóvil, rechazando todas las alternativas posibles que les proponíamos", ha afirmado.
Según Herri Sanferminak, "el principal argumento de los representantes municipales era el supuesto objetivo de evitar las molestias que se ocasionarían a los vecinos de la parte vieja". "Nosotras también entendemos las molestias que sufren los vecinos y vecinas del barrio a lo largo de estos 9 días, más aún, siendo muchas de nosotras vecinas de la parte vieja. Creemos en unas fiestas en las que todas y todos los ciudadanos puedan disfrutar y descansar y esa es nuestra apuesta. Por ello, propusimos reducir el horario de los conciertos hasta las 00 horas y el de la txozna hasta la 1, así como varias posibles plazas que pudieran causar menos daños al vecindario", ha explicado.
Sin embargo, desde el colectivo han señalado que "recibimos de nuevo una negativa rotunda a principios de mayo". "Además, la semana pasada supimos que el Ayuntamiento autorizará 10 barras de bares en la Plaza del Castillo hasta las 2.30 de la mañana. No entendemos por qué el Ayuntamiento ve imprescindible la salida de Herri Sanferminak de lo viejo al mismo tiempo que permite barras en la Plaza del Castillo", han planteado.
Por último, ha considerado que "no han tenido en cuenta que la apuesta que hemos hecho durante años para que el espacio festivo de Herri Sanferminak sea un espacio seguro frente a las agresiones sexistas, LGTBfobas y racistas, demostrando así que no está en su agenda que las fiestas sean de disfrute para todos y todas".
Herri Sanferminak ha afirmado que, "después de los duros tiempos que hemos vivido, queríamos que los esperados Sanfermines fueran un florecimiento popular, un despertar colectivo, pero debido a las negativas y rechazo del Ayuntamiento, hemos decidido suspender el programa para todos los ciudadanos y ciudadanas de todas las edades, y no poner txoznas". "Eso no significa que Herri Sanferminak vaya a desaparecer. Buscaremos otras formas de celebrar y reivindicar unas fiestas que pongan nuestros valores en el centro", ha asegurado.
Tras conocer la noticia, Geroa Bai Iruñea opina que “la decisión de Navarra Suma de no montar el recinto festivo en la Runa es una postura sectaria y un nuevo seguidismo al legado de la época en la que la alcaldesa era Yolanda Barcina”. La coalición añade que “el hecho de que no haya txoznas en San Fermín supone apartarlos de las fiestas de San Fermín”.
Asimismo, subraya que “Navarra Suma actúa de forma unilateral sin hablar con los ciudadanos y las ciudadanas que conforman Pamplona-Iruña y haciendo caso omiso a lo enriquecedora que es la diversidad en nuestra ciudad”. Y lamenta que “es otra alcaldada más precedida por la última iniciativa en la que Enrique Maya ha decidido poner 10 barras en la Plaza del Castillo sin consultar con el vecindario”.
Aclara que “es importante escuchar a la ciudadanía, a los agentes sociales y a los grupos de la oposición”. Y concluye que “es indignante” que sin un diálogo previo se estén enterando de “decisiones importantes tomadas por el equipo de gobierno a través de los medios de comunicación”.
