La política del todos contra UPN tiene facturas que cobrarse en Navarra: se trata de los socios antinaturales internos y externos del Gobierno de la socialista Chivite: los nacionalistas de Geroa Bai y EH Bildu, que reivindican la politización e imposición del euskera en Navarra.
Este viernes, la líder de Geroa Bai, Uxue Barkos, exigía pasos hacia la supresión de la zonificación lingüística en Navarra y este sábado, el vicepresidente primero y consejero de Presidencia e Igualdad del Gobierno de Navarra, Félix Taberna, le ha frenado los pies asegurando que "no va a haber ningún cambio" en cuanto a la zonificación lingüística en la Comunidad foral.
Taberna, que ha destacado los pasos "muy significativos" del Gobierno de Chivite en materia del euskera y ha defendido avanzar "desde la propia voluntariedad". Así, ha destacado que el PSN "ha dado unas señas y unos pasos muy significativos en el avance del euskera". "Basta ver los presupuestos en materia del instituto Euskarabidea y nosotros también hemos anunciado que seguiremos en esa línea" que "vamos a favorecer y vamos a transitar", ha subrayado.
Pero, apoyándose en la coincidencia con UPN y PP, ha señalado que en el Parlamento de Navarra "hay una mayoría que entiende que la Ley Foral del Euskera tiene que partirse de la zonificación y, por lo tanto, ahí no va a haber ningún cambio". "Otra cosa es todo lo que signifique el apoyo hacia la euskera desde esas personas que quieren seguir favoreciendo, que quieren seguir cultivando un idioma propio y, en ese sentido, se va a avanzar", ha precisado.
En opinión del vicepresidente, "no hay discrepancia" en este sentido porque "el Gobierno toma las decisiones de una forma corporativa y única, lo que puede haber son diferentes valoraciones". "El Gobierno de Navarra está asentado en un espacio de izquierda, en un espacio progresista, tiene una visión nacionalista y, en ese sentido, vamos a convivir en pluralidad. La política, en definitiva, no es otra cosa que convivir desde la diversidad", ha concluido.
