El socialista navarro Koldo García Izaguirre ha sido detenido por participar en una supuesta trama corrupta de compra de mascarillas durante la pasada pandemia de coronavirus. Fuentes policiales señalan que el montante de los contratos supera los 50 millones de euros, según la estimación de los investigadores.
Asesor del exministro José Luis Ábalos y muy vinculado al PSN como concejal en Huarte, fue conocido en los últimos años por sus distintos escándalos vinculados al Gobierno de Pedro Sánchez y su ocupación en diferentes puestos. También ha sido detenida en la misma operación su mujer, la socialista navarra Patricia Úriz Iriarte, que formó parte de la dirección del partido con María Chivite y que fue colocada por Ábalos posteriormente en el ministerio.
La investigación de la Audiencia Nacional y la Guardia Civil sitúa a Koldo García Izaguirre, el que fuera asesor del exministro socialista José Luis Ábalos, y a otro socio suyo como cabecillas de la trama de presuntas mordidas de dinero desviado desde contratos valorados en 53 millones de euros suscritos por administraciones públicas para adquirir material sanitario durante la pandemia de Covid-19.
Según fuentes de la investigación, Koldo García y un socio suyo, Víctor de Aldama, serían los líderes de este entramado. Este último es presidente del Zamora Club de Fútbol y está relacionado con la empresa Soluciones de Gestión y Apoyo a Empresas, situada en Zaragoza y también relacionada con este presunto caso de corrupción.
A los dos les une una larga amistad y habrían disfrutado de un alto nivel de vida, investigándose si esto guarda relación con las mordidas. El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno tiene previsto tomar declaración a entre seis y siete de los 20 detenidos, entre los que figuran tanto Koldo García como Víctor de Aldama.
En la operación también ha sido detenido por la Unidad Central Operativa (UCO) otro empresario vinculado a la empresa Soluciones de Gestión y Apoyo a Empresas, José Ángel E., aunque fue puesto en libertad, al igual que ocurrió con la mujer de Koldo García, que también quedó en libertad tras su arresto.
Las citadas fuentes han apuntado que la presunta trama se centraba en intermediar en contratos durante la pandemia de Covid-19 de material que fue destinado a los ministerios de Transportes e Interior, así como comunidades autónomas como Baleares y Canarias.
Se trata de una investigación de la Fiscalía Anticorrupción que dirige el Juzgado Central número 2 de la Audiencia Nacional, que autorizó ayer el arresto de 20 personas y alrededor de 26 registros domiciliarios o requerimientos.
Según ha informado la Fiscalía en una nota de prensa, las diligencias practicadas --declaradas secretas-- afectan a varias provincias españolas y guardan relación con presuntos hechos delictivos asociados a delitos de organización criminal, tráfico de influencias y cohecho, relativos a la adjudicación de diferentes contratos de varias administraciones.
Fuentes de la investigación han asegurado a Europa Press que entre los detenidos no figura ningún cargo público, ya que las diligencias se centran sobre el papel como intermediarios de Koldo García y su socio.
Aunque en Navarra su principal ocupación fue vigilante de seguridad y portero de algún club de alterne, terminó como asesor de un ministro socialista, que le llegó a colocar como consejero de Renfe.
Como vigilante, fue condenado a más de dos años de prisión por una paliza a un hombre, aunque nunca ingresó en prisión porque fue indultado. También fue juzgado y condenado por golpear en Pamplona a un chico de 17 años en plenos Sanfermines de 2011. Tuvo que indemnizar a la víctima. Ocurrió justo cuando tomó posesión como concejal del PSN en Huarte.
Sin conocerse más éxitos que sus condenas por agresiones y su vinculación con los clubes de alterne, Pedro Sánchez le dedicó unas palabras en su cuenta de Facebook. El actual presidente del Gobierno se refería al todavía concejal como un "guerrillero de grandes dimensiones físicas, y corazón comprometido" que era "un referente político en la lucha contra los efectos de la crisis y las políticas de la derecha".
A partir de aquí comenzó a formar parte del círculo del PSOE en Madrid y de José Luis Ábalos, que lo nombró asesor, escolta, chófer y hombre de confianza para cualquier labor, incluida su presencia en el aeropuerto en la noche en la que la vicepresidenta Delcy Rodríguez llegó a Barajas y mantuvo un encuentro con Ábalos en el que se descargaron decenas de maletas en Madrid, ciudad y país que Delcy Rodríguez tenía prohibido pisar.
De ahí pasó a ser consejero delegado de Renfe y poco después se supo que Patricia Úriz Iriarte, mujer de Koldo García, había sido colocada a dedo como ayudante de secretaria en el mismo ministerio.
Mucha repercusión tuvo también la presencia en Canarias de Koldo García y Ábalos en un hotel de lujo, donde según se pudo saber, el asesor del ministro pagaba con billetes la estancia y, en especial, los masajes y las botellas de champagne.
