Hace no demasiado tiempo María Chivite dijo públicamente en el Parlamento de Navarra que ella estaba donde tenía que estar, que era atendiendo los intereses de Navarra como presidenta que es, en Navarra. Se lo dijo a la oposición cuando el Senado la convocó para hablar de la ley de amnistía, pero se excusó aduciendo este motivo y acusando al PP y a UPN de intereses partidistas.
Este sábado, los intereses partidistas eran los de Chivite, que ha participado en Coruña en la fiesta que el PSOE se ha montado en la capital gallega con intereses puramente partidistas y electorales, dejando sólo, como máxima representación institucional, al máximo representante de la autoridad eclesiástica navarra, Florencio Roselló, en su toma de posesión.
Al menos, en esta ocasión ha tenido la decencia de enviar a su vicepresidente primero, Félix Taberna, porque el Ayuntamiento de Pamplona que preside el bildutarra Joseba Asirón no ha hecho ni eso. No sólo no ha acudido a la invitación, sino que no ha enviado a absolutamente nadie, aunque sólo fuera por el exigible decoro institucional que ha demostrado ciento y mil veces que no tiene.
En la agenda institucional del alcalde de Pamplona, Joseba Asirón, este sábado sólo había un acto: acudir al frontón Labrit a ver un partido de pelota a mano.
Si ha estado muy arropado, y mucho, por las autoridades eclesiásticas, no sólo por los consagrantes, el cardenal Juan José Omella, arzobispo de Barcelona; el exarzobispo de Pamplona y Tudela, Francisco Pérez y el obispo de Castellón, Casimiro López; sino porque también ha acudido el nuncio apostólico en España, Bernardino Auza.
Además, han concelebrado la Misa el cardenal arzobispo de Madrid, José Cobo, el cardenal arzobispo emérito de Valladolid, Ricardo Blázquez, el arzobispo mercedario de Ciudad Bolívar, Ulises Gutiérrez, el arzobispo castrense, Juan Antonio Aznárez, el arzobispo de Zaragoza, Carlos Escribano, el arzobispo de Burgos, Mario Iceta, el arzobispo de Santiago de Compostela, Francisco José Prieto, el arzobispo y obispo de Urgell, Joan Enric Vives, el administrador apostólico de Huesca y Jaca, Vicente Jiménez, el obispo mercedario de Copiapó (Chile), Ricardo Morales, el obispo de Segorbe, Casimiro López, el obispo de Teruel, José Antonio Satué, el obispo de Vitoria, Juan Carlos Elizalde, el obispo de San Sebastián, Fernando Prado, el obispo de Bilbao, Joseba Segura, el obispo de Palencia, el navarro Mikel Garciandía, el obispo de Calahorra, Logroño y La Calzada, Santos Montoya Torres, el obispo de Vic, Román Casanova Casanova, el obispo de Solsona, Francisco Conesa, el obispo de Mondoñedo y Ferrol, Fernando García Cadiñanos, el obispo de Tarazona, Vicente Rebollo, el obispo de Santander, Arturo Ros, el obispo auxiliar de Santiago de Chile, Álvaro Chordi, el obispo auxiliar de Barcelona, Javier Vilanova, el obispo auxiliar de Toledo, César García Magán, el obispo emérito de Ávila Jesús García Burillo, el obispo emérito de Tarazona, Eusebio Hernández, el obispo emérito de Bolivia, Javier del Río y el obispo emérito de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, José Luis Redrado. Un total de 33 obispos.
Entre las autoridades se encontraba Félix Taberna, vicepresidente primero y consejero de Presidencia e Igualdad del Gobierno de Navarra, así como el presidente del Consejo de Navarra, Alfredo Irujo. Han acudido también Joaquín Galve, presidente del Tribunal Superior de Justicia de Navarra y Jaime Goyena, Fiscal Superior de Navarra.
Los empresarios estaban representados por su presidente, Juan Miguel Sucunza, mientras que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad de Estado han llevado a sus máximos representantes: José Miguel Barbero, Coronel Jefe de la 9ª Zona de la Guardia Civil, José María Borja, Jefe Superior de Policía Nacional en Navarra, Iván Ortueta, Jefe de Policía Foral, Antonio Sánchez, Jefe de Policía Municipal de Pamplona.
No ha faltado tampoco el Comandante Militar de Navarra y general jefe del Mando de Tropas de Montaña, Francisco Martínez Lozano, ni la rectora de la Universidad de Navarra, María Iraburu, que ha ido acompañada de su directora de desarrollo corporativo, Isabel Olloqui.
Carlos Fernández Valdivielso, Secretario General de la Confederación Empresarial Navarra, Maite Quintana, directora de Cáritas Diocesana de Pamplona; Mayte Fortún, Presidenta de Manos Unidas de Navarra, Juan Carlos de Balle, Lugarteniente de España Oriental de la Orden Ecuestre del Santo Sepulcro de Jerusalén, José Ángel Zubiaur, Presidente de dicha sección; María Jesús Irigoien, directora de Pastoral Penitenciaria de Pamplona; Ángel Luis Ortiz, Secretario General de Instituciones Penitenciarias; Olga Ballesteros subdirectora General de Relaciones Institucionales y los responsables del centro penitenciario de Castellón, Celia Bautista y Marco Crespo; así como de la cárcel de Pamplona Pedro Lacal.
También han asistido otros representantes públicos como:
María Caballero, Senadora por Navarra
Javier Remírez, Senador por Navarra
Alberto Catalán, Diputado por Navarra
Sergio Sayas, Diputado por Navarra
Carmen Alba, Concejal del Ayuntamiento de Pamplona
María Echávarri, Concejal del Ayuntamiento de Pamplona
Cristina Ibarrola, Concejal del Ayuntamiento de Pamplona
Javier Labairu, Concejal del Ayuntamiento de Pamplona
Carlos García Adanero, concejal del Ayuntamiento de Pamplona
Eradio Ezpeleta, secretario de Organización de UPN
Miguel Iranzo Hernández, alcalde de Alcorisa (Teruel)
Javier Solozábal, alcalde de Sangüesa
Marta Ruiz de Alda, alcaldesa de Estella
Rafael Ansó Ansó, Alcalde de la Cendea de Cizur
