El conjunto de Jagoba Arrasate ha vuelto a entrenarse este jueves después de caer ante el Real Madrid (2-0).
Osasuna ha vuelto a los entrenamientos después de cosechar este miércoles la primera derrota de la temporada por 2-0 a frente al Real Madrid.
Sin tiempo para lamentarse, el equipo dirigido por Jagoba Arrasate ya se centra en el próximo partido de LaLiga Santander que disputará el domingo frente al Levante en el Ciudat de Vàlencia.
El técnico vizcaíno ha dirigido una sesión que ha servido para la recuperación física de los jugadores que disputaron minutos en Madrid y más exigente para el resto de la plantilla. Los suplentes y desconvocados se centraron en ejercicios para la mejora de la técnica, posesiones y partidos.
La nota positiva han sido los regresos de Íñigo Pérez y Kike Barja. El centrocampista navarro ha completado la mayor parte del entrenamiento junto a sus compañeros entrando así en la fase final de su proceso de recuperación.
Por su parte, el extremo navarro ha pisado por primera vez el césped de Tajonar desde que se rompiese el ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda.
Dos meses después de su intervención, Kike Barja ha iniciado una fase de la recuperación en la que ya puede trotar sobre el terreno de juego.
— C. A. OSASUNA (@CAOsasuna) September 26, 2019
El camino es duro, amigo. Pero tú lo eres más. 👊😉 pic.twitter.com/KxrmhgRz7L
Mientras, Oier y Darko Brasanac se ejercitaron con el grupo mientras que David García lo hizo de manera individual junto a Unai García.
Este viernes, los rojillos volverán a ejercitarse en las instalaciones de Tajonar en una sesión a puerta abierta. Con esta sesión y la que tendrá lugar el sábado, a puerta cerrada, Jagoba Arrasate completará la preparación para el próximo duelo liguero.
