Mina Lungu y Iulia Diac son dos rumanas que se han integrado perfectamente en el estilo de vida de Pamplona. Llevan 17 años seguidos trabajando en su propia tienda de arreglos de ropa en el barrio de Iturrama.
La tienda 'Mina y Iulia arreglos de ropa' está situada en la calle Pintor Crispín 10 en el barrio de Iturrama de la capital navarra. Está muy cerca de otros establecimientos que hemos conocido en este apartado de comercio local.
Como es el caso, por ejemplo, de la mercería Marta que cerró sus puertas en la misma calle a final del mes de diciembre, o la frutería Virginia que está abierta desde hace 36 años en la calle Serafín Olave 33.
Mina Lungu tiene 55 años de edad y Iulia 57: "Yo llevo 20 años en Pamplona y Iulia 18 años. Nos conocemos desde 1987 en nuestro país. No sabíamos nada de Pamplona. Trabajé primero como interna en una casa siete meses. Luego regresé a Rumanía y posteriormente volví", señala Mina.
"Yo trabajaba en una casa y un día compré la prensa. Había un anuncio que pedía modistas. Llamé, hice una prueba y me contrataron enseguida. Tras un año pensé porqué no podíamos abrir una tienda y con mi compañera decidimos abrir este negocio en octubre de 2007", indica Mina Lungu.
Las dos mujeres tienen a la familia en Pamplona con marido e hijos mayores: "Estamos muy contentas. Metemos muchas horas, pero merece la pena. Hay que cumplir los compromisos con los clientes. La gente es muy maja y nosotras también atendemos muy bien a los clientes", afirma Iulia Diac.
"Vinimos para buscar un futuro mejor. Ahora nos queremos quedar en Pamplona y los hijos tampoco van a volver. Después de 20 años hay una parte de ti que quiere volver a Rumanía, pero ya no encajas. Además, tenemos hipoteca y hay que pagarla", comenta Mina Lungu.
Curiosamente, llevan puesta una insignia de Osasuna en su camisa de trabajo: "Es un regalo del presidente Luis Sabalza porque le arreglamos la ropa. Es su regalo y lo llevamos con mucho orgullo".
"Estamos muy contentas. La gente es muy maja. Los vecinos nos ayudaron mucho al principio en octubre de 2007. Nos traían trabajo que no les hacía falta para ayudarnos", indica Iulia emocionada. Además, no cierran al mediodía y trabajan con un horario de 9 a 19 horas.
"Al principio intentamos el turno partido pero no merece la pena. Nos dimos cuenta que a los clientes les viene bien venir al mediodía y por eso abrimos. Es mejor que ir y volver al mediodía a la Rochapea, que es donde vivimos", comenta Mina Lungu.
Lo que más trabajan son "pantalones, camisas, mangas, chaquetas, cortinas, piel, y bordamos también. Tenemos siete máquinas y un montón de hilos. Tenemos muchos clientes. Nos da para vivir y para pagar todos los impuestos. Merece la pena porque luego salgo a la calle y veo todo bien"
De Pamplona les gusta "la tranquilidad que hay sobre todo. Puedes andar de un sitio a otro sin problemas y sin coche. Me gusta todo. Todo es verde. No conocíamos nada de la ciudad. Llegué aquí el 1 de mayo de 2003 y vi mucha tranquilidad. Muy bonita, muy segura y hay de todo", concluye Mina Lungu.
