“Los partidos políticos expresan el pluralismo político, concurren a la formación y manifestación de la voluntad popular y son instrumento fundamental para la participación política. Su creación y el ejercicio de su actividad son libres dentro del respeto a la Constitución y a la ley. Su estructura interna y funcionamiento deberán ser democráticos".
De este texto del art. 6, de la vigente Constitución , deduzco una utilidad de los partidos políticos, pues sirven para que los electores, libremente, introduzcan su voto en la urna materializando su opción de elegir al partido que más se identifica con su ideología o principios. Es la base de la democracia. Los electores confían en sus electos y su coherencia.
Habitualmente concurren a las elecciones varios partidos sobre todo en la izquierda y alguno del centro-derecha con remota posibilidad de alcanzar el poder que pueden conducir a los electores a confusión y dispersión del voto. Para evitarlo los partidos mayoritarios llaman al voto util, a concentrar los votos en ellos, pues habrá formaciones que no alcanzan representación significativa, o ninguna. Se dice son votos echados a la basura.
Hay algunos partidos de izquierda y del denominado nacionalismo, que actúan al margen del procedimiento, saltándose lo que prescribe el art. 6º C.E. sobre respeto a la Constitución y la ley, sin que ello les suponga inconveniente alguno. No respetan ni cumplen las reglas del juego, pero aprovechan la utilidad de ser un partido, para disfrutar sin decoro alguno, de sueldos, dietas, y privilegios , con pactos y opacas negociaciones que condicionan el poder ejecutivo de la Nación y de alguna CCAA.
Siguiendo con la utilidad, me ha sorprendido o quizás no he entendido, la manifestación del presidente del partido mayoritario en las pasadas elecciones forales de que tiene que ser util. “Libertad de votar lo que considere en cada momento”.
Da la impresión de intentar seguir el camino de los partidos que sin escrúpulo ni ética alguna, se unen para obtener una cuota de poder basados en ser utiles, obviando posibles pactos con formaciones afines o de principios similares. Sería un fraude para buena parte de sus electores, y una frivolidad que conlleva un riesgo importante para el futuro de su partido.
Espero que el deseo de ser util no suponga olvidar uno de los principios constitutivos del partido: "La defensa de la identidad de Navarra, de sus derechos originarios e históricos, y de su permanencia como Comunidad Foral propia, diferenciada e integrada en la nación española y por ende formando parte de la Unión Europea”.
