La Asociación Navarra contra la Fibrosis Quística inicia una ronda de contactos con instituciones, partidos y Defensor del Pueblo para “reclamar el derecho a recibir la mejor atención posible”.
A comienzos de 2015 había e la Comunidad Foral 1.503 pacientes diagnosticados, un 2,4 por 1.000 habitantes, y al final de 2017 la prevalencia había disminuido un 47%.