El gambusino era un animal imaginario a quien los mozos de los pueblos llevaban a cazar a los tontos que venían de la capital. Como la especie, dada su irrealidad, podía tener la apariencia y talla que a cada cual se le ocurriera las artes empleadas para su captura era también muy dispares.
Jason Paul, alemán de 25 años, es un experto en 'parkour' y decidió iniciarse en Barcelona al famoso juego Pokémon Go. Preguntaba a los viandantes cómo conseguir pokémons y luego los cazaba con su estilo particular, llegando a subir por la fachada del hotel Arts, establecimiento de lujo de 154 metros de altura. Al bajar tenía una sorpresa: la policía.