Experimento

El otro día le pedí un favor a una amiga; en concreto se trataba de un recado. No me acuerdo bien por qué, pero no podía acercarme a la librería a recoger el último de Sara Mesa. Recuerdo que al día siguiente me dio la bolsa con la novela, el tique y los cambios, y yo más feliz que una…

Esa amiga trabaja en la misma empresa que yo, así que dejé a mi vera aquella bolsa tras hojear deprisa ‘Cara de pan’ mientras pensaba: “Voy a hacer un experimento”. Y coloqué la novela, boca abajo, en un lugar visible, esperando que la curiosidad de quien pasara por ahí provocase que cogieran el libro, le echaran un vistazo…

Y eso me recordó a su vez a un fragmento de la brillante columna homenaje de Juan Gracia Armendáriz a Paco Umbral: En el cuarto de estar Umbral tenía una talla gótica de una Virgen embarazada. Ponderé la belleza de la obra, me miró y, con su voz de órgano, dijo: "Es que es mi aduanera, quien pasa a su lado y se fija es que tiene sensibilidad".

Y esa sensación tan solo la experimenté con dos personas, que incluso me pidieron la novela una vez que yo la hubiera leído. Estoy deseando terminar ‘Cara de pan’. Y estoy deseando dejarles este buen libro a Geno y Laura. Por su curiosidad, por su sensibilidad.

Ideación de ‘Experimento’

Esta anécdota la viví hace poco, y tal cual la reproduzco.

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