• miércoles, 24 de abril de 2024
  • Actualizado 20:27

Opinión / osasuNAvarra

Osasuna - Valencia: El Sadar no es el Bernabéu

Por José Mª Esparza

El Osasuna que perdió contra el Valencia recordó que cayó aquí contra Getafe, no se pareció en casi nada al que empató en el Bernabéu. Puro desbarajuste. Este equipo no es para jugar al patadón, y menos en casa.

Partido de La Liga Santander entre Osasuna y Valencia disputado en el estadio de El Sadar. IÑIGO ALZUGARAY
Partido de La Liga Santander entre Osasuna y Valencia disputado en el estadio de El Sadar. IÑIGO ALZUGARAY

Tracemos el contexto para al menos poder calificar el partido de raro. Veamos: dos penaltis fallados, dos tarjetas rojas a los rojos, otra más a Diakhaby en el banquillo, Gattuso que arrea una patada inmisericorde a la nevera, dos cambios de Arrasate en el descanso señalando a la defensa, otra sustitución poco después, el Chimy lanzando córners siendo el 9 que no había en el campo, los ché que pudieron golear a placer y acabaron pidiendo la hora, tenían controlado un partido frente a once que terminó en un descontrol ante nueve. La mejor entrada (más de veinte mil) no mereció semejante despropósito.  Partido para el olvido.

Sin duda, lo más salvable fue aquello de ‘Osasuna nunca se rinde’. Es verdad. A pesar del horrible partido, los rojillos lucharon hasta el final, sin perder las ganas de remontar un encuentro donde pudieron salir goleados. Alguien se preguntará: ¿y si marca Kike García? ¿si Chimy acierta en el penalti? Esto es fútbol, y el partido quizás hubiera sido otro. No obstante, el Valencia podría hacerse veinte preguntas más como ésas.

A Arrasate le venía saliendo muy bien la línea de tres por delante del doble pivote. Ha sido la que ha dado personalidad al equipo adelante, jugando entre líneas, por fuera o por dentro, descolocando defensas, etcétera, etcétera. El caso es que ayer esa línea no apareció, quedó engullida entre las torres valencianistas y las no tan torres. Los chicos de Gattuso estuvieron por encima de Torró-Moncayola, que no conectaron con nadie, y Osasuna se desvaneció.

Sólo quedó el recurso del patadón, el juego directo buscando a Kike García, quien sabe para qué. Yo desde luego, no lo sé. Si el Valencia ya había sabido cerrar a Osasuna, con el juego en largo de los locales controló el partido infinitamente más fácil. Digamos que en la primera parte el Valencia secó primero a Osasuna para ahogarle después, con mejor presión y más velocidad.

Tan mal debió ver Arrasate la primera mitad, es decir, el coladero atrás y la falta de circulación e ideas adelante, que cambió a dos defensas en el descanso y solo esperó ocho minutos más para sacar al Chimy. Ni esperó al minuto 63. Lo nunca visto. Lo malo es que en la segunda parte el Valencia ya había cogido carrerilla, se sintió más fuerte y convencido, y pasó por encima, fallando, sobre todo Cavani, una y mil más.

Hasta Gattuso se volvió loco con sus cinco cambios que también sumieron a su equipo en el caos. Buscó reafirmar el control frente a un equipo en inferioridad y sin una idea buena, y provocó el correcalles que a punto estuvo de costarle la vida. La patada a la nevera tras la estúpida expulsión de Diakhaby fue la mejor acción del partido. Por lo menos la más divertida

Por cierto, otras dos cosas rescatables. La primera, Juan Cruz. Criticado en estas líneas cuando llegó, hoy es un pedazo de jugador. Cada partido hace más cosas y todas bien. También crea peligro arriba. Un comodín que cumple con rapidez y precisión. La segunda nota a destacar fue la única acción con pase en corto, la pared entre Kike García y Abde que terminó en el error monumental del primero. De entrar, habría sido una de las mejores jugadas del año, pero… Lo dejo en puntos suspensivos.

El Sadar no es el Bernabéu. Los planteamientos de allí no valen aquí, donde hay que tomar la iniciativa y sólo vale ganar. Los dos últimos partidos en casa han sido muy similares en casi todo. Ambos han terminado en derrota. Arrasate tropieza en la misma piedra. Esperemos que a la tercera no repita.


  • Los comentarios que falten el respeto y que no se ciñan al tema de la noticia, podrán ser eliminados.
  • Cada usuario será el único responsable de sus comentarios.
Osasuna - Valencia: El Sadar no es el Bernabéu