Un ejemplo de dignidad

El Ayuntamiento de Pamplona, gobernado por Bildu, Geroa Bai, Aranzadi-Podemos e Izquiera Unida y Batzarre ha pinchado en hueso en su intento de euskadunizar Pamplona a marchas forzadas. 

Los padres de la escuela infantil Donibane, en el barrio de San Juan, se han plantado ante la medida arbitraria y sin consenso de Asirón y están ofreciendo un ejemplo de dignidad a toda la sociedad navarra.

Pisoteados y vapuleados en el intento del "Gobierno del cambio" de expulsarlos de su colegio, donde decidieron libremente educar a sus hijos en castellano, han decidido seguir escolarizando a los niños en el mismo centro, con los mismos docentes y trabajadores. Van a matricular a sus hijos en el colegio, a pesar de las advertencias de Bildu de que les impondrá el euskera, quieran o no quieran. 

Haría bien el consistorio en escuchar a los padres y harían bien los partidos que presumían de la "participación ciudadana" y de las "nuevas formas" en reconocer su error y su falta de respeto a estas familias, a las que han tratado de convertir en una suerte de ciudadanos de segunda fila. 

Mientras tanto, el resto de la sociedad está en deuda con estas familias que han decidido defender con su ejemplo su derecho a elegir en libertad y sin imposiciones el modelo lingüístico para sus hijos y, sobre todo, a no ceder ante un modo de hacer política que recuerda ya a los peores gobiernos nacionalistas que se extienden en otras comunidades.