• jueves, 28 de marzo de 2024
  • Actualizado 20:35

Opinión / Periodista y Doctora Internacional en Comunicación.

Repolitizando la Educación

Por Carolina Díaz-Espina

Se sabía que esto iba a ocurrir, pero al menos se esperaba una justificación más elaborada y verosímil.  

La OPE planteada por el Consejero de Educación, José Luis Mendoza, pone de manifiesto el uso político y partidista de la educación que quiere hacer el ejecutivo de Uxue Barcos.

El acceso a la función pública no puede estar sujeta a ningún tipo de discriminación lingüística. La OPE ha de responder a criterios de necesidad y siempre buscando la mejora del sistema educativo para ofrecer una educación de calidad a los niños y jóvenes de la Comunidad Foral. Dichos criterios de necesidad deben hacerse públicos para que todos los que incurren a la oposición, así como todos los ciudadanos, tengan acceso a la información íntegra de manera transparente, justa  y equilibrada. Los profesores deben saber a qué responden las oposiciones y los ciudadanos tienen derecho a saber a qué se destinan sus impuestos, respondiendo a las demandas educativas que los padres quieren para sus hijos. Parece poco creíble que una comunidad donde conviven dos lenguas, solo una, que según los datos es la minoritaria tanto en el ámbito educativo como en la calle, sea el requisito indispensable para el 70% de las plazas.

Pero las externalidades negativas de esta propuesta no acaban aquí. En el curso 2015/2016 la Universidad Pública de Navarra habilitó 110 plazas de nuevo ingreso para Educación Infantil y 180 para Educación Primaria. A éstas, hay que sumar las plazas de los demás cursos. Una oposición planteada en términos de 70% de las plazas para euskera y 30% para castellano, no solo es injusta desde el punto de vista de la igualdad de oportunidades, sino que además ocasionará un éxodo masivo de talento navarro a otras comunidades. Y esto, por un gobierno que no está pensando en sus ciudadanos y su identidad, sino en politizar y adoctrinar utilizando como instrumentos los recursos públicos que pertenecen a todos los navarros.

La propuesta ha pasado a la mesa sindical, que tiene en su mano la oportunidad de poner cabeza en este asunto y reclamar los derechos legítimos para los profesores y siempre pensando en el alumnado y su formación. Para ello deben tener presente el contexto global, dinámico, multidisciplinar, plural y competitivo en el que nos encontramos. Un ejemplo todo esto son, por ejemplo, los datos sobre exportaciones en relación al PIB.  Desde el año 2009 las exportaciones han crecido del 15,1% del PIB hasta el 23,5% del PIB en 2014. Además, esto incide en la tendencia cada vez más global de los negocios. Si los jóvenes de la comunidad emigran no puede ser porque, en el caso de los profesores, les eche el ejecutivo del momento, sino porque ellos decidan afrontar nuevos retos y oportunidades, pero siempre preparados gracias a un sistema educativo que responda a los retos del hoy y del mañana. En definitiva, para gestionar la educación hace falta personas con visión y no políticos cegados por ideas concretas que quieran imponer a los ciudadanos.


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