• martes, 16 de abril de 2024
  • Actualizado 14:52

Blog / Cartas al director

Obituario | Miguel Mª Santamaría Iturralde, “El fenómeno” de los años 60

Por La voz de los lectores

Obituario remitido por Ángel Inda, compañero de la Rondalla Armonía.

Miguel Mª Santamaría Iturralde, de la Rondalla Armonía de Pamplona. CEDIDA
Miguel Mª Santamaría Iturralde, de la Rondalla Armonía de Pamplona. CEDIDA

Con el revuelo que armó en toda España cuando sólo tenía 20 años por el famoso concurso de Radio Madrid, ahora, con 77 se ha marchado callandico, sin hacer ruido, en silencio su guitarra, fiel compañera desde que falleciera recientemente su esposa Coro Iribarren. Sus hijas  Aitzíber y Goizargi; hermanos Rosa Mª y Javier Lugea (x), Jesús Javier y el  sobrino Mikel, fueron los más sorprendidos al conocer la dolorosa noticia de que había aparecido muerto en su domicilio, cerrando así el último capítulo de su vida.    

La dignidad que Miguel buscaba en la muerte, me confesó, hemos de hallarla en el arte de vivir una existencia lo más plena posible. Por eso él era muy feliz con la Rondalla Armonía y con el grupo de Alfonso Esparza, que le despidieron en el cementerio a ritmo de bolero. Porque como dice Sherwin Nuland “la muerte de cada uno de nosotros será tan singular como el propio rostro que mostramos a lo largo de nuestra vida”. En el caso de Miguel leemos en Youtube esta definición de su agradable talante: “Con su aspecto risueño, alegre, de niño grande, se nos ha ido Miguel. Sin dar ningún aviso, de repente, dejando consternados a sus amigos y compañeros de rondallas, de tantas sobremesas de guitarras y canciones en la terraza del Danubio, de Huarte... y tantos sitios en los que repartieron su alegría”.

Ha sido un poema como trabajador pues tenía a gala decir que conservaba nóminas de 18 empresas diferentes donde había trabajado de administrativo, programador informático, camionero de rutas internacionales, músico…y últimamente censor jurado de cuentas.

¡Ah!, y no me perdonaría si me olvidara de su pasión por la bicicleta y por el Camino de Santiago, que solía hacer en bici con el expresidente de Osasuna Javier Miranda.

Y vamos con el famoso concurso que publica Desolvidar de una noticia del Arriba España de fecha 10/12/1961: 4.000 pesetas de premio en mano y 2.000 de renta semanal para un joven de Pamplona.

"Se busca un fenómeno" fue un curiosísimo espectáculo radiofónico que durante las 25 semanas que duró su emisión atrajo a millones de oyentes. El país entero seguía con asiduidad las proezas de los participantes en un concurso de habilidades itinerante que no requería grandes conocimientos ni destacar en materias específicas. Al contrario, lo que se medía era su capacidad de adaptación a una serie de pruebas de lo más aleatorio.

Tras una primera retransmisión desde en los estudios centrales de Radio Madrid, en la que nadie consiguió superar las estrambóticas pruebas y hacerse con el titulo de Fenómeno, la expectación era grande cuando el viernes 8 de diciembre de 1961 el famoso locutor Antolín García se personó en La Voz de Navarra. Estaba previsto que la mecánica del programa propiciara el choque entre concursantes, beneficiándose de esa continua rivalidad; nadie sospechaba que en su segunda entrega fueran a dar con un auténtico fenómeno.

Miguel, natural de la calle San Lorenzo, era uno de los tres concursantes, seleccionados previamente entre todos los presentados. Pronto impuso su dominio al superar una a una las siguientes pruebas (para colmo, no se admitía error posible; si fallabas al primer intento quedabas fuera de competición):

1) Identificar tres notas musicales tocadas aleatoriamente al piano.

2) Darle una calada a un cigarro y, en diez segundos, expulsar cinco aros de humo.

3) Repetir un refrán recitándolo al revés, palabra por palabra.

4) Mantener el balón durante treinta segundos sin que tocase el suelo.

5) Mecanografiar el eslogan comercial de uno de los cinco anunciantes: "Calzados Eya Canasa, elegantes, deportivos y contra el agua", "Embutidos y conservas de carne pamplonica, siendo Pamplonica cosa rica"...-, mientras cantabas en voz alta ¿dónde están las llaves, matarile...? Esta última nos parece especialmente complicada; nosotros lo intentamos, y así nos han quedado algunos artículos...

Al vencedor se le permitía modificar una de las pruebas para futuros programas. Miguel sustituyó la del balón por otra que consistía en darle toques con la cabeza disponiendo del mismo tiempo. Él, sin entrenar, consiguió dar 96 cabezazos. Y, según nos cuenta, no pudo tener mejor ocurrencia: "Casi todos los viernes había alguien que lograba hacer el resto de las pruebas, pero cuando tocaba enfrentarse a la del balón, no había quien batiera mi marca. A la de 50 o así se les caía".

Juanito Alonso, portero del Real Madrid, llegó a declarar que nadie podría conseguirlo. De esta manera, Miguel ostentó el liderato durante 14 semanas, haciéndose cada vez más famoso. "Íbamos a bailar a la Chantrea y mis amigos me presentaban a todo dios. En lugar de bailar me pasaba la tarde hablando con desconocidos. Aunque supongo que si hubiera sido por televisión habría sido peor".

Por cada semana que mantuvo el título de fenómeno, recibió como recompensa un lote de productos de cada uno de los patrocinadores, así como 2.000 pesetas. "Era muy buen premio. En aquel tiempo, su padre, que llevaba 20 años trabajando en la Diputación, ganaba 3.000 al mes". Aprovechó el dinero acumulado para comprarse un magnetofón, una bici y un acordeón.

Sin decir adiós a su familia y amigos se fue el pasado lunes 15 de febrero, mientras luchamos a brazo partido contra la pandemia y matamos el gusanillo con nuestros ensayos y conciertos. Te echaremos en  falta, Miguel.

  • Los comentarios que falten el respeto y que no se ciñan al tema de la noticia, podrán ser eliminados.
  • Cada usuario será el único responsable de sus comentarios.
Obituario | Miguel Mª Santamaría Iturralde, “El fenómeno” de los años 60