La película es más que las circunstancias de su estreno.
- viernes, 19 de abril de 2024
- Actualizado 19:57
La película es más que las circunstancias de su estreno.
A pesar de ser un cinéfilo no soy particularmente fan de las películas de Woody Allen, en ocasiones me resulta un poco neurótico y algo deprimente, algo que busca intencionadamente. Una muestra de mi falta de afinidad con el director neoyorkino es que mi película favorita, y me encanta, suya es Match Point. Precisamente, el título “menos Allen”.
Por supuesto, disfruto de varias de sus obras Annie Hall, con frases como “nunca querría pertenecer a un club en el que aceptasen a tipos como yo” y me parece admirable su capacidad física e intelectual para estrenar una película cada año a sus 83 años. Sin embargo, había un par de buenas razones para verla; primero, la premisa de los personajes ya me sugería cierta empatía con algunos de los dilemas a los que estos veinteañeros protagonistas se enfrentaban y, más aún, si se dejaba a un lado el melodrama y se tomaba todo con cierto sentido del humor.
Otro motivo es el casting, Thimothée Chalamet (a un año de consagrarse como superestrella con el estreno de Dune), Elle Fanning, Jude Law, Selena Gomez, Diego Luna y Liv Sche. La falta de pretensiones, la química entre los actores y el dinamismo de contar la historia de un día sin pretensiones consigue resultar un producto más que agradable. El proceso por el que los protagonistas acaban por aprender a vivir y disfrutar las curiosas situaciones que se les van presentando durante el día resulta liberador.
Curiosamente, hay un elemento “meta” parecido a Dolor y Gloria ya que el personaje de Fanning se sumerge en el Hollywood neoyornkino durante unas horas dándonos algunas impresiones de cómo ve Allen la industria (me sorprende que una joven como tu sepa quién es De Sica), a sí mismo para reírse de todo ello con un director de cine atormentado por su éxito con el personaje de Liv Schreiber.
Todo el elenco parece perfecto, Fanning lo tenía complicado con una faceta cómica debido al histrionismo del personaje que podría haber sido fatal, pero que arranca varias carcajadas. Incluso a mí, que solo quería que apareciese Selena Gomez de nuevo junto con Thimothée Chalamet (su dinámica es la más entretenida).
Todo esto acompañado de una agradecida ligereza, buena música y Nueva York de fondo. Resulta imposible no recomendarla a todo el mundo. Por supuesto, todo el filme ha sido rodeado de cierta polémica alrededor de Allen, no conozco los detalles y tampoco me interesan en exceso.
Pienso que hay que separar al autor de la obra, siempre hasta cierto punto, y si uno tiene motivos expresos para rechazarla que sea por motivos informados y no por corrientes. En España parece que le está yendo bien en taquilla pero ha podido estrenar en Estados Unidos.
