Dos gotas de agua

Una obra de Basquiat batió records a mediados de mayo al venderse por 100 millones de euros. Se trata de un lienzo que no tiene ni marco ni título, y que compró el empresario y coleccionista de arte japonés Yusaku Maezawa.

Hace poco quise probar si aún funcionaba una radio antigua. La encendí y lo mismo escuché hablar de tormentas con granizo y plusvalías que acerca de la cláusula de rescisión de un futbolista lleno de egos y tatuajes. No cupieron por el altavoz los millones de euros que pronunció el exaltado locutor.

Estas dos patadas que recibí me obligaron a comprarme unas botas de fútbol y unos pinceles de pelo de marta. Convencí al directivo de Villa Abajo Fútbol Club y me federé en la última categoría del que algunos llaman deporte rey. Al lienzo inmaculado lo salpiqué de gotas de pintura azul eléctrico en una obra que titulé ‘Para el mejor postor’.

Después de remover Roma con Santiago he logrado que mi cláusula de rescisión supere los 90.000 millones de euros. Y hasta los diarios Marca y Sport, por una vez en su vida, se han puesto de acuerdo con sus portadas: “Por las nubes”. Me ponen fino…

Mi obra de arte, que no he querido enmarcar para que quien la vea se centre en la representación, tiene un precio de salida en la subasta que organiza un servidor de 101 millones de euros.

Algunos me preguntan si estoy loco. Yo les contesto que es la ley de la oferta y de la demanda…

Ideación de ‘Dos gotas de agua’

Una obra de Basquiat batió records a mediados de mayo al venderse por 100 millones de euros.

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