El Helvetia Anaitasuna se mostró en su último partido como un equipo muy inocente, sin fuerza, queriendo ser técnico en ataque pero sin conseguirlo y eso que enfrente tenía un adversario bastante asequible.
Es cierto que el equipo ha cambiado bastante en jugadores pero no es menos cierto que de las nuevas incorporaciones hay algunos que cuentan poco para el entrenador ,al menos de momento. Son los de casa los que tienen que poner la carne en el asador para salvar la papeleta .
Se falla demasiado en el balance defensivo. Hay que ser más duros y emplear una defensa 6-0 contundente. No es una división que te permita florituras dejando huecos. Porque los contrarios no son mancos .Las defensas mixtas o abiertas pueden valer para otras categorías pero no para la división de honor.
Podríamos hablar de la portería pero mejor lo dejamos para otra ocasión.
El que tiene que ver lo que pasa es el entrenador y parece mirar a otra parte .
El cúmulo de desaciertos le llevó a perder 5 o 6 tantos de ventaja que llevaba a falta de 5 minutos y a casi perder los dos puntos.
Para competir con garantías en la máxima garantía hay que ofrecer muchos más argumentos .
No hay mejor equipo que la temporada pasada. Queda mucho trabajo por hacer,y a algunos mucho que aprender. Lo malo que queda cada vez menos tiempo.
Lo mejor: Los puntos que le sacan del último puesto .
Lo peor: La pobre imagen que ofreció el equipo.
Anécdota:
Los porteros del equipo parecen apartados del resto.
