El condenado, de 38 años y que sufre un trastorno mental, ha sido condenado a 9 meses de prisión y no podrá acercarse al menor.
Un vecino de una localidad de la comarca de Pamplona de 38 años ha sido condenado a 9 meses de prisión, por un delito de abuso sexual, por haber enviado a un menor de 15 años a su teléfono móvil una foto de un hombre desnudo, así como varios wasaps en los que le proponía quedar para tener relaciones sexuales.
En la sentencia, dictada de conformidad por la titular del Juzgado de lo Penal número 1 de Pamplona tras un acuerdo entre el fiscal y la defensa, al procesado se le ha estimado la eximente incompleta de trastorno mental.
Por este motivo, al inculpado, que no podrá comunicarse ni acercase al denunciante durante un año y nueve meses, la juez le ha impuesto una medida de seguridad, consistente en el sometimiento a tratamiento médico adecuado a su patología durante un máximo de 18 meses.
Sobre las 14 horas del 3 de agosto de 2018, según se considera probado en la resolución judicial, el acusado se acercó a un grupo de chicos de unos 16 años y comenzó a hablar con ellos de fútbol. Les dijo que había jugado a ese deporte pero que lo había tenido que dejar por problemas con las drogas y que ahora quería retomarlo.
Los jóvenes le comentaron que podría jugar en un determinado equipo en la categoría Boscos y, por eso, uno de los menores se ofreció a hacer una gestión, motivo por el cual intercambiaron sus teléfonos.
Minutos después, sobre las 14.44 horas, el inculpado remitió al menor una fotografía de un hombre, al que no se le veía la cara, desnudo y con el pene en erección, así como varios mensajes de texto y de audio “en los que le proponía, con palabras de contenido inequívocamente sexual, quedar con el grupo de menores”, y en especial con él, para mantener relaciones sexuales.
Estos hechos fueron denunciados por el padre del menor debido al miedo que este sintió hacia el procesado.
En el momento de los hechos, según la sentencia, el encausado había sido diagnosticado de un trastorno esquizoafectivo y, en periodos previos, había consumido anfetaminas y mostraba dependencia a las benzodiazepinas, lo que unido a la falta de ingesta de la medicación prescrita afectaba a sus facultades intelectivas y volitivas de forma moderada.
