El joven de 25 años tiene la incapacidad permanente total desde 2014, cuando ocurrieron los hechos, y no puede trabajar de su profesión.
El Juzgado de lo Penal nº2 de Pamplona ha dictado sentencia firme y condena a un hombre a indemnizar con 55.000 euros a un joven de 25 años al que contrató "de forma verbal" por unos servicios para arreglar la fachada de una vivienda de la localidad foral de Andosilla en agosto de 2014.
La incapacidad permanente total para trabajar como obrero de la construcción (su profesión) a la que tiene que hacer frente el joven se debe a una caída que sufrió mientras ambos realizaban estos trabajos sobre el tejado del espacio que reparaban. Los trabajos eran de construcción, albañilería y labores de limpieza y de pintado.
Tal y como indica el juez, esta persona deberá hacer frente también a 4 meses de prisión por estos hechos. Le considera "autor responsable de un delito por imprudencia grave" y deberá pagar también, además de la indemnización a la víctima, las costas judiciales.
Los hechos ocurrieron el 25 de agosto de 2014 cuando el acusado contrató al joven verbalmente por sus servicios por un precio de 9 euros la hora. Trabajaban en el tejado de un local del municipio cuando la víctima no se percató de la cercanía de los paneles de poliester, lucernarios, situados
en el tejado de la nave agrícola. Fue entonces cuando dio unos pasos hacia atrás cayendo hasta el interior desde una altura de 5,80 metros.
Como resultado de este accidente sufrió un traumatismo craneoencefálico leve, además de distintas contusiones y fracturas. Tardó en curarse de todas las heridas un total de 407 días, de los que 14 pasó ingresado en el hospital y 393 estuvo incapacitado.
Añade la sentencia judicial que el condenado "no había instalado protección para evitar la caída" ni había formado a la víctima sobre los trabajos a realizar.
