El acusado provechó que su sobrina había acudido al domicilio familiar para pasar las fiestas y se coló en la habitación de la chica de 16 años.
La Fiscalía ha pedido 13 años de cárcel para un vecino de una localidad de la Ribera de Navarra que va a ser juzgado esta semana acusado de un delito de agresión sexual a una sobrina menor de edad, de tan solo 16 años.
El ministerio público pide además para el acusado la inhabilitación para cualquier trabajo que conlleve un contacto regular y directo con menores durante cinco años más que la pena de prisión que finalmente se le imponga, ocho años de libertad vigilada al terminar de cumplir la condena privativa de libertad, y una indemnización de 364 euros por los días de tratamiento y de 20.000 euros por los daños morales.
Los hechos ocurrieron durante las fiestas patronales de 2016, cuando de madrugada el acusado y su esposa llegaron a casa y dos horas después él fue a la habitación que ocupaba la joven, que estaba pasando unos días en el domicilio de su abuela.
Según la fiscalía, aprovechando que la chica dormía y "con ánimo libidinoso", el acusado le levantó la chaqueta del pijama y le bajó el pantalón y las bragas para tocarle y lamerle el cuerpo, además de introducirle varios dedos en la vagina.
La joven durante un tiempo simuló estar dormida por miedo a que su tío le pegara pero, visto que no deponía su actitud, en un momento dado fingió despertarse y le pidió sin éxito que parara.
Cuando intentó huir fue agarrada fuertemente por los hombros y arrojada de nuevo sobre la cama, donde continuaron los tocamientos y fue obligada a masturbarle.
Como consecuencia de estos hechos la fiscalía indica en su escrito que la chica estuvo siete días sometida a tratamiento contra la bacteria Clamidilla y ha sufrido una depresión.
