Hay 5 acusados de unos hechos ocurridos en 2012 por los que murió Jesús Pérez Íñiguez que fue agredido "atado de pies y manos".
Hoy comienza el juicio con jurado popular contra cinco acusados de golpear “brutalmente” a un vecino de Fustiñana, Jesús Pérez Íñiguez, quien, sujeto de pies y manos, recibió por todas las partes de su cuerpo 88 golpes que le ocasionaron la muerte.
En sus conclusiones provisionales, el Ministerio Fiscal solicita 21 años de prisión para cada uno de los cinco procesados por un delito de asesinato con la concurrencia de la circunstancia agravante de ensañamiento. La acusación particular, ejercida por la madre y la hermana de la víctima, reclaman 25 años de prisión.
La vista oral, presidida por el presidente de la Sección Segunda de la Audiencia de Navarra, se celebrará los días 14, 15 y 16 de septiembre a partir de las 10 horas en la Sala del Jurado, en la primera planta del Palacio de Justicia de Pamplona.
En su escrito, el Ministerio Público relata que la madrugada del 21 de septiembre de 2012, los cinco acusados, Francisco Javier Pulido Rodríguez, Mª Rosa Cornago Serrano, Javier Lahuerta Vicen, Iván Pérez Amorós y Paulo José Pereira Rúas, recogieron a Jesús Pérez Íñiguez en su domicilio de Fustiñana. De allí, continúa el fiscal, le trasladaron a la finca que Pulido tenía en Cascante —en el paraje conocido como ‘Calchetas’—, propiedad de la exmujer de Pulido, pero que él utilizaba habitualmente.
Al parecer, según explica el Ministerio Fiscal, subyacían unos “problemas previos” entre Pulido y Pérez Íñiguez. En la finca, éste fue sujetado de los pies y de las manos, “y sin tener posibilidad de defensa por la situación en la que se encontraba”, comenzaron a golpearle brutalmente con diversos objetos.
Recibió hasta un total de 88 golpes propinados “con la clara intención de agravar y alargar el sufrimiento y la agonía” de la víctima, que falleció a consecuencia de un shock hipovolémico. Posteriormente, los encausados trasladaron el cadáver hasta las inmediaciones del aparcamiento del Hospital Reina Sofía de Tudela, donde lo abandonaron.
Respecto a la responsabilidad civil, el fiscal reclama que los inculpados indemnicen a los familiares de la víctima con 120.000 euros.
