La Guardia Civil ha detenido en Alcalà de Xivert (Castellón) a una madre, que ha ingresado en prisión, y a su hija por hacerse pasar por videntes y tarotistas y extorsionar y amenazar con documentación falsa a sus clientes para que pagaran objetos de elevado coste que supuestamente les iban a ayudar a resolver sus problemas.
Según han informado fuentes de la Guardia Civil, las mujeres se ganaban la confianza de sus víctimas ofreciendo servicios de videntes y tarotistas a través de líneas telefónicas del 806. La gente llamaba pidiendo ayuda para su vida personal a través de la cartomancia y el tarot, y las ahora detenidas, cuando contactaban con ellas, les vendían efectos y objetos para realizar supuestos conjuros y les presentaban facturas falsas con un coste elevado.
Cuando las víctimas no querían ingresar el dinero exigido por estos objetos las detenidas les amenazaban con represalias judiciales y presentaban para ello documentos judiciales falsos que les envían a sus domicilios. Extorsionaban a las víctimas y las obligaban a pagar una cuantía para evitar el embargo de sus propiedades.
Una vez realizado el ingreso, las ahora detenidas se desplazaban a una entidad bancaria para retirar el dinero.
La Guardia Civil tuvo conocimiento de la identidad de una víctima vecina de Barcelona, a la que le exigieron 78.000 euros en concepto de objetos comprados relacionados con el mundo del tarot, y llegó a pagar 52.000 euros; al no querer abonar el resto, empezaron las amenazas.
Posteriormente, le remitieron falsos documentos judiciales en el que se le advertía de pagos de multas y embargos por una valor de 30.000 euros.
Los guardias civiles realizaron numerosas investigaciones en las que pudieron averiguar que las falsas videntes recorrían las entidades bancarias de la comarca castellonense del Baix Maestrat para retirar el dinero en efectivo producto de sus estafas, por lo que se establecieron dispositivos de vigilancia y seguimiento por la zona.
Como resultado pudieron identificar a dos mujeres de 76 y 54 años de edad, que salían de un banco portando escondidos en el interior de una bolsa de plástico 30.000 euros en efectivo obtenidos ilícitamente y que pudieron ser recuperados y entregados a la autoridad judicial.
En el desarrollo de las pesquisas la Guardia Civil comprobó que la madre tenía en vigor tres requisitorias de búsqueda, detención e ingreso en prisión por parte de los Juzgados de Pamplona, Valencia y Barcelona y una requisitoria de búsqueda, detención y personación de un Juzgado de Soria, todos ellos por delitos de extorsión.
Posteriormente la Guardia Civil efectuó dos registros domiciliarios autorizados en la localidad de Benicarló (Castellón) donde se recuperó diversa documentación que acreditaba la implicación de ambas mujeres en los delitos de extorsión y falsedad documental.
Las detenidas junto con las diligencias obtenidas fueron puestas a disposición del Juzgado de Vinaròs (Castellón), quien decretó el ingreso en prisión de la madre.
