El cliente denunció que la empresa de telefonía le seguía cobrando mensualidades pese a que habían devuelto el terminal.
Agentes de la Policía Foral, adscritos a la Brigada de Judicial Norte, han citado recientemente en calidad de investigado a un vecino de Pamplona de 35 años por un presunto delito de apropiación indebida tras apropiarse el teléfono móvil que devolvió un cliente, valorado en más de 1.000 euros.
La Policía Foral tuvo constancia del posible delito cuando un cliente de la empresa distribuidora de telefonía móvil interpuso una denuncia, ya que le estaban cobrando las mensualidades de un terminal que había devuelto.
El presunto autor, que trabajaba en la empresa como comercial, se ofreció personalmente a tramitar una devolución que finalmente no realizó.
Agentes de Policía Judicial se encargaron de realizar el correspondiente atestado, que fue remitido a un juzgado de instrucción y a la fiscalía de Pamplona, ha informado la Policía Foral.
