En animal, que ha recorrido unos ocho kilómetros entre ambas localidades, ha sido abatido con un dardo anestésico.
Una angustiosa persecución es la que se ha vivido la mañana de este viernes entre Novallas y Cascante. Un toro ha escapado del conocido como encierro andando de la localidad zaragozana. El animal, de la ganadería de Pedro Caminero de Palencia, ha sido capturado, ya en campos del pueblo ribero, unos ocho kilómetros después, según han señalado fuentes de Policía Foral de Navarra.
Antes de ser abatido, el animal ha dado un susto enorme a los vecinos de ambas localidades, haciendo incluso que un hombre de 77 años, vecino de Cascante, resultara herido al toparse con él a las puertas de su casa y tratar de escapar por un terraplén próximo.
El hombre, con pronóstico leve, ha sido atendido por magulladuras en las piernas, brazo y costado derecho en el centro de salud de la localidad. Además, varios coches han sufrido daños materiales.
DARDO ANESTÉSICO
Al parecer, solo ha sido uno de los toros quien se ha desviado de sus hermanos y ha seguido su camino por el campo hasta que unos ocho kilómetros después, ha sido abatido con un dardo anestésico. En la captura han participado agentes de Policía Foral, de Policía Municipal y el propio ganadero.
Tras abatirle, y con ayuda d varias personas, se ha trasladado al animal a un camión adaptado para el transporte de ganado.
Este encierro de Novallas es una tradicional celebración taurina en la que sueltan a toros y vacas por la zona de los cerros y campos para bajarlos hasta la localidad en compañía de mozos a caballo. Comienza a las 9 de la mañana y termina a las 11.
Fuentes de Guardia Civil de Tarazona han señalado que no ha habido que lamentar heridos.
