El epicentro ha tenido lugar en la localidad de Olave, aunque se ha dejado sentir con claridad en distintos puntos de la comarca.
Pamplona ha vuelto a temblar este lunes por la tarde, pasadas las 14:30 horas: un nuevo seísmo, de 3 grados de magnitud y 12 kilómetros de profundidad, se ha dejado sentir en distintos puntos de la Cuenca, como Sarriguren y Burlada.
Aunque según datos del Instituto Geográfico Nacional su epicentro se ha registrado en la localidad de Olave se ha sentido con claridad durante unos breves instantes en la capital navarra.
La magnitud de este terremoto ha sido exactamente la misma que la de sus precedentes, ocurridos en la Cuenca el pasado 28 de marzo. Estos temblores se registraron con dos minutos de diferencia, y su epicentro fue la localidad de Egüés en ambos casos. También se sintieron en distintos puntos de la Cuenca y sorprendieron a los vecinos.
Esa misma tarde se produjo otro, 20 minutos después, en la localidad de Ripa, aunque no tan fuerte, y su alcance fue de 1,8 grados.
EL GRAN TEMBLOR
En los últimos meses el terremoto más potente que ha sufrido la Cuenca, que despertó a muchos vecinos, alcanzó los 4,4 grados de magnitud y tuvo lugar el 10 de marzo. Fue, además, el que inició esta inusual ola de temblores y tuvo su epicentro en Oricáin.
Este movimiento sísmico duró cerca de 5 segundos y asustó notablemente a la población, aunque afortunadamente no hubo que lamentar daños. Su primera réplica se produjo a las 9.27 horas en Egüés, al noreste de Pamplona, con una magnitud de 2,5, a la que siguieron otros leves movimientos. Al día siguiente, la madrugada del sábado 11, se produjo otro seísmo, con epicentro en Zubiri, de 1,6 grados.
Días después, el 25 de marzo, tuvo lugar un nuevo temblor, de 2,4 grados, con epicentro en Olave. Ya el 28 de marzo se produjeron los últimos temblores que se habían registrado hasta el de este lunes 1 de mayo.
