Un vecino de Pamplona de 43 años ha ingresado en prisión acusado de robo con violencia en una farmacia en el mismo día que la Policía Municipal le denunció por incumplir el confinamiento.
Agentes de la Policía Nacional detuvieron al sospechoso, con numerosos antecedentes penales, el pasado día 7 como autor de un atraco en el que se apoderó de 170 euros de la caja registradora.
Según un comunicado de la Jefatura Superior, el hombre, de etnia gitana, entró en la farmacia y pidió "un jarabe para la tos y un medidor de la misma, extremo éste que ya le resultó sospechoso a la farmacéutica".
Y seguidamente, añade, "se saltó el mostrador y, enseñando una navaja, solicitó a la encargada el dinero de la caja registradora".
El visionado de las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad del establecimiento fue clave para resolver el caso, en la que también colaboró la Policía Municipal de Pamplona que ese mismo día sancionó al presunto atracador por saltarse el confinamiento, momento en el que le requisaron la navaja que exhibió al parecer en la farmacia.
Puestos ambos cuerpos en contacto, la víctima identificó sin ningún duda a la persona sancionada por la Policía Municipal como el presunto autor del robo en su establecimiento, por lo que finalmente el día 13 fue detenido llevando las mismas zapatillas y la misma cazadora que el día del atraco.
