La Policía Municipal de Pamplona ha tenido un fin de semana "muy ajetreado y complicado", especialmente durante las tardes y las noches debido a la masiva presencia de personas que estaban de fiesta incumpliendo en algunos casos la normativa sanitaria y generando molestias al vecindario.
En un comunicado, en el que apunta que los participantes en las fiestas eran mayoritariamente jóvenes, señala que entre las 312 intervenciones de todo tipo que han llevado a cabo destacan 83 por problemas de convivencia en los que la mediación policial ha resultado fundamental para solucionarlos.
A esas se suman 40 por ruidos o molestias a horas intempestivas, algunas de las cuales se han zanjado con denuncias a los responsables de las viviendas que los generaban.
En este caso, indica que se han retirado cuatro equipos de altavoces de gran potencia que causaban molestias en diferentes puntos de la ciudad y que aglutinaban a grupos de personas numerosos.
Además, la Policía Municipal ha desalojado a treinta personas que estaban celebrando una fiesta en una sociedad deportiva.
Durante el fin de semana la Policía Municipal de Pamplona ha participado en el dispositivo especial de cribado realizado en el interior de la estación de autobuses por parte del servicio sanitario para realizar pruebas de detección de virus a los jóvenes provenientes de la costa mediterránea.
