La Policía Municipal de Pamplona ha realizado, durante este pasado fin de semana, 45 actuaciones por incumplimiento de la normativa sanitaria, que han conllevado la interposición de 99 denuncias. La sanción asciende, con carácter general, a 100 euros.
En concreto, 52 denuncias han sido por botellón y 47 por no usar la obligatoria mascarilla, según ha informado la Policía local.
Por otro lado, las patrullas de Policía municipal han atendido durante el fin de semana 10 accidentes de tráfico. Además, a 5 conductores se les han incoado diligencias judiciales: 3 por influencia del alcohol y las otras 2 por conducir careciendo de carné (una lo conducía y la otra lo habría permitido).
Durante este pasado fin de semana, la Policía Local de Tudela ha informado de varios sucesos ocurridos en esta localidad de la Comunidad foral. En primer lugar, varias patrullas se desplazaron a la Glorieta de Olite por una colisión entre dos turismos. Posteriormente, una ambulancia procedió a atender a la conductora que tenía dificultad para respirar.
Asimismo, un conductor informó que una mujer se había salido de la vía chocando con una farola. La conductora del vehículo afectado que sufría, mientras conducía, un ataque epiléptico, dio negativo en las pruebas de alcohol y drogas.
Finalmente, cabe destacar que, una mujer de Tudela tuvo que llamar de urgencias a los bomberos de la ciudad porque se había quedado fuera del domicilio sin llaves y teniendo el fuego encendido de la vitrocerámica.
CASI 500 SANCIONES POR NO LLEVAR MASCARILLA
El miércoles 12 de agosto, mediante Resolución de la Concejalía de Seguridad Ciudadana, el Ayuntamiento de Pamplona prohibía la práctica del ‘botellón’, independientemente de la franja horario en la que se desarrollara y del número de personas que participaran.
El consumo de bebidas, preferentemente alcohólicas, en zonas públicas se consideraba una actividad no autorizada, debido a la concentración de personas y a la generación de situaciones que pueden favorecer el contagio de la Covid-19. Policía Municipal ha detectado que quienes siguen realizando ‘botellones’ se han trasladado de las zonas habituales, más expuestas, a otros lugares menos transitados.
El pasado 17 de julio entró en vigor la Orden Foral 34/2020, de 15 de julio, de la Consejera de Salud, mediante la cual se hacía obligatorio el uso de la mascarilla, independientemente de que se pueda garantizar la distancia interpersonal de seguridad de 1,5 metros.
En este mes, la Policía Municipal de Pamplona ha sancionado a 495 personas por no llevarla puesta o por su uso inadecuado, es decir, por no cubrir desde parte del tabique nasal hasta el mentón.
