Se ha detenido a dos personas por distribuir droga después de quedar con sus 'clientes' mediante códigos telefónicos.
Agentes de la Policía Nacional, de la Jefatura Superior de Policía de Navarra, han procedido a la detención de dos personas por tráfico de drogas, concretamente cocaína y speed, que distribuían en la capital de la comunidad Foral. Asimismo, se ha desmantelado un punto de venta de droga en Pamplona
Los detenidos distribuían la droga en la ciudad tras ser contactados telefónicamente por los 'clientes', los cuales tras concertar una cita mediante códigos establecidos previamente, se dirigían al domicilio de uno de los investigados donde eran abastecidos. En otras ocasiones aprovechaban la cobertura ofrecida por un establecimiento abierto al público (ajeno a la operación), dada la gran afluencia de personas que allí se encontraba para de esta manera realizar la venta en pequeñas dosis.
Ante la gran demanda de estupefacientes, que precisaban por parte de los compradores, tenían la necesidad de ser abastecidos continuamente.
Los detenidos habían creado un complejo entramado para destinar los altos beneficios que conseguían con la distribución de drogas y con ello poder integrar el dinero procedente de esta actividad en el circuito financiero legal beneficiándose de ello.
Con este fin llegaron a adquirir distintas viviendas repartidas en la Comunidad Foral y en La Rioja, así como a constituir diversas sociedades pantalla con la que aprovechaban para solicitar préstamos personales a entidades bancarias con la intención de realizar obras de acondicionamiento y adquirir el material necesario para ello, destino final que era realmente para la adquisición de nuevas partidas de sustancias estupefacientes.
Como resultado de la operación el Juzgado de Instrucción número cuatro de Pamplona autorizó el registro de dos domicilios en Pamplona y otros dos en la localidad riojana de Autol, en los que se intervino 5.600 euros en metálico, 50 gramos de cocaína en roca, diversas dosis de MDMA, pistolas simuladas y una gran cantidad de munición metálica del calibre 9 mm Pb, así como balanzas de precisión y envoltorios preparados para elaborar las dosis.
En todos sus desplazamientos utilizaban diversos vehículos a nombre de terceras personas con la intención de eludir de esta manera la vigilancia y control policial, usando de igual manera las identidades de personas afines y familiares para la adquisición de vehículos, viviendas y creación de sociedades.
Una vez habían obtenido la titularidad de las viviendas eran nuevamente arrendadas a otros inquilinos sin realizar contrato alguno, recibiendo en metálico las cantidades correspondientes al arrendamiento y gastos de luz, consumos que realmente no eran atribuibles a los legítimos inquilinos dado que ninguno de estos inmuebles tenía contrato con una empresa suministradora de energía, disponiendo para ello de una conexión no autorizada.
Para habitar dichos pisos conseguían arrendarlos a individuos inmigrantes que necesitaban ser empadronados en algún domicilio para de esta manera regularizar su situación y obtener las ayudas que facilita la Comunidad Foral para las personas sin recursos.
