Ha publicado un comunicado en el que agradece la actuación de los cuerpos policiales, los sanitarios y los vecinos.
La familia Casanova-Ovejas, tres de cuyos miembros murieron el pasado martes en Olite en un caso de parricidio, ha agradecido este sábado el "respeto y cariño" con el que se ha tratado el caso por los cuerpos policiales, los sanitarios y por los propios vecinos y conocidos.
Los hechos tuvieron lugar el miércoles por la tarde en Olite, en el domicilio del matrimonio formado por Valeriano Casanova, de 81 años y enfermo de alzhéimer, y Pilar Ovejas, de 72 años y movilidad reducida, quienes murieron a manos de su hijo, Ciriaco, de 47 años, que dejó esposa e hija, y que posteriormente se quitó la vida.
Hasta el lugar acudieron efectivos de la Policía Foral, Policía Municipal de Olite y Guardia Civil, así como servicios sanitarios de emergencia, incluido el helicóptero del Gobierno de Navarra y psicólogos que asistieron a los familiares.
El Ayuntamiento de Olite decretó dos días de luto oficial, mientras que el club de fútbol Erriberri, que preside otro de los hijos del matrimonio fallecido, también declaró cinco días de luto y decidió que ninguno de sus equipos dispute la jornada prevista para este fin de semana. Además, fue multitudinaria la asistencia a los funerales celebrados el viernes en la parroquia de San Pedro de Olite.
Con todo ello, la familia ha mostrado este sábado en un comunicado su "eterno agradecimiento" por el trato recibido tras el "desgraciado suceso", y subraya el "respeto y cariño" con el que todos los servicios policiales y sanitarios implicados han actuado, más allá de su "diligencia y profesionalidad".
Además de a ellos, dan las gracias a todos quienes, con sus "gestos, abrazos y mensajes", les han hecho sentirse "arropados", y manifiestan que todo ello les "reconforta".
Este es el comunicado íntegro: "La familia Casanova-Ovejas, tras el desgraciado suceso del pasado miércoles en Olite, queremos agradecer el respeto y el cariño con el que se ha tratado lo ocurrido. Desde las primeras atenciones por parte de los cuerpos policiales -Policía foral, Policía Municipal de Olite y Guardia Civil- y de los servicios sanitarios, hasta la diligencia de SOS Navarra con el despliegue del helicóptero y la puesta a disposición de los psicólogos, pusieron desde el primer momento la efectividad en marcha. Agradecemos su empatía y delicadeza sin dejar de lado su profesionalidad, con detalles de humanidad que van mucho más allá de su estricta obligación. Gracias también al Ayuntamiento de Olite, al club de fútbol Erriberri, a todo el pueblo de Olite y a Navarra entera, con cuyos gestos, abrazos y mensajes nos hemos sentido arropados. Queremos hacer público que todo ello nos reconforta y, aunque no tenemos palabras suficientes para expresarlo, estaremos eternamente agradecidos".
