Se espera que, tanto el navarro Imanol Etxarri Galartza como el otro español Xabier Agirrezabala Iradi, sean dados de alta esta semana.
Los dos ciudadanos españoles heridos en el incendio de una discoteca de Bucarest que causó 30 muertos y más de 180 heridos el pasado viernes, entre ellos el navarro Imanol Etxarri, están evolucionando favorablemente y es probable que sean dados de alta este mismo jueves, informaron a Efe fuentes oficiales.
Imanol Etxarri Galartza, de 22 años, y Xabier Agirrezabala Iradi, de 21 años, presentan una evolución favorable y han sido trasladados a una sección del Departamento de Cirugía Plástica "con posible fecha de externalización el próximo jueves, 5 de noviembre", señaló esa fuente.
Los dos están ingresados en un hospital perteneciente al Servicio Rumano de Inteligencia, explicó un portavoz de ese organismo.
"Los pacientes se han beneficiado de un tratamiento adecuado y de asesoramiento psicológico", indicó.
El número de muertos en el incendio de la discoteca se elevó anoche hasta los 30, una cifra que los médicos temen pueda incrementarse de forma considerable debido a la gravedad de 30 de los heridos, según aseguró el secretario de Estado de Interior, Raed Arafat."Es posible que la cifra se duplique", dijo.
Todos los fallecidos han sido identificados, pero aún no todos los heridos. El presidente de Rumanía, Klaus Iohannis, criticó ayer el incumplimiento de las normas de seguridad en el local que provocaron el incendio."No podemos dejar que la corrupción se extienda hasta la muerte", aseguró.
El país balcánico cumple hoy su tercer día de luto y vivió ayer una jornada emotiva con una marcha de 12.000 personas desde el centro de Bucarest hasta el lugar del siniestro, donde se dejaron miles de flores y velas en memoria de las víctimas.
Según explicaron a Efe dos testigos de la tragedia, un pequeño artefacto pirotécnico soltó chispas que provocaron que la almohadilla de un pilar comenzara a arder.
Pocos segundos después, las llamas ascendieron hasta el techo, lo que causó el pánico entre los 400 asistentes en el club y una estampida.
