Varias llamadas alertaron de su peligro a su paso este lunes por la N121A, donde fue imputado por un delito contra la seguridad vial.
Un currículum de antecedentes es el que respalda a un conductor navarro que este mismo lunes fue vuelto a pillar conduciendo por las carreteras de Navarra con una tasa escandalosa de alcohol.
Agentes de la Policía Foral, adscritos a la División de Seguridad Vial, imputaron a un hombre de Tierra Estella de 51 años este delito contra la seguridad vial, al ofrecer una tasa de 1.07 mgr/litro aire espirado en el control al que fue sometido. El hombre ya había sido imputado por idéntico delito en Sesma (2009) y en Zizur (2013).
La repetición de los hechos se produjeron el lunes en la N121A (Pamplona-Francia por Behobia), cuando varias llamadas a SOS-Navarra alertaban de un camión articulado circulando de forma irregular. El peligro en la carretera se hizo evidente con el registro de llamadas que se recibió alertando de su arriesgada conducción.
Una patrulla de radar, que se encontraba realizando un control en la misma vía, se movilizó para localizarlo hasta que pudieron visionarlo y confirmar que circulaba dando bandazos. Cuando le dieron el alto pudieron comprobar que el chofer presentaba síntomas de ebriedad y la prueba de etilometría lo corroboró, siendo la tasa para estos vehículos en 0.15 mg/litro. Sextuplicaba la cifra. En esos momentos transportaba plástico a Francia y fue inmovilizado.
Además, se procedió a su imputación y ha sido citado en el juzgado de guardia para el próximo jueves. La Policía Foral conocía los antecedentes del conductor.
SEGUNDO IMPUTADO, EN BERA
Por otra parte también por la tarde de este lunes se realizó otra imputación en la misma vía, la N121A. Una patrulla de la comisaría de Elizondo realizaba un control preventivo de seguridad ciudadana en Bera, cuando los agentes dieron el alto a un vehículo.
Al identificar al conductor, vecino de Segovia de 31 años, saltó un “código rojo” por carencia de puntos en su carné de conducir, lo que supone un delito contra la seguridad vial.
La actuación se completó con el control indiciario de droga en saliva, que resultó positivo en hachís y conllevó una denuncia administrativa por infracción muy grave a la LSV (1000 euros y 6 puntos). Próximamente deberá presentarse en el juzgado de guardia de Pamplona.
