Xabi Gartzia portó el domingo uno de los últimos relevos con la ikurriña en Pamplona y fue recibido entre abrazos por Joseba Asirón.
Xabi Gartzia, uno de los líderes de la Korrika organizada por los abertzales de AEK, fue detenido en 2014 por acosar e intimidar a los concejales de UPN durante la procesión de San Fermín, algo que ha denunciado este lunes el portavoz de UPN, Enrique Maya. Gartzia no fue condenado por estos hechos.
"Uno de los personajes estelares de la Korrika es un viejo conocido porque fue de las personas que nos insultaba y nos acosaba en la calle Curia", ha denunciado Enrique Maya, que ha mostrado su malestar por la utilización de la carrera sobre el euskera por parte del cuatripartito. "Utilizaron un proceder infantil, exagerado y teatralizado", ha manifestado Maya sobre las fotos de los miembros del cuatripartito con la ikurriña de la Korrika.
Maya ha denunciado la utilización de los espacios públicos de Pamplona de forma masiva, la entrega de 50.000 euros y la coincidencia del domingo de Ramos, lo que dificultó las procesiones. "Las escenas de alegría no eran por el euskera, sino por la ikurriña y por Euskalerria", ha confirmado Maya sobre el comportamiento de los concejales del cuatripartito.
RECIBIDO POR JOSEBA ASIRÓN
Gartzia fue recibido recientemente por Joseba Asirón en la casa consistorial, con quien posó abrazado. Asirón ha entregado 50.000 euros de dinero público a la Korrika y AEK para sus fastos en Pamplona, además de cederles múltiples espacios gratuitamente para instalar txoznas y espacios en la ciudad. El alcalde acudió extasiado el domingo para portar el relevo de la ikurriña durante unos metros junto a los concejales del cuatripartito.
Xabier Gartzia fue uno de los participantes en los violentos incidentes de la calle Curia en los Sanfermines 2014, donde los ediles de UPN recibían escupitajos, golpes e insultos cuando la procesión de San Fermín regresaba con el cabildo a la catedral, tal y como puede verse en la fotografía.
Meses después, en la primavera de 2015, fue detenido junto con, al menos, otras cuatro personas por estos hechos. Todos fueron acusados de atentados y desórdenes públicos, aunque Gartzia, al menos a fecha de hoy, no ha sido juzgado ni condenado por estos incidentes.
Gartzia, según han informado fuentes policiales, cuenta con antecedentes policiales por desórdenes públicos, injurias, amenazas y daños. Además, estuvo también investigado por la colocación de la ikurriña gigante que sirvió para boicotear el Chupinazo de 2013 en Pamplona.
Este domingo, en el Paseo Sarasate, Xabier Gartzia, que ahora se presenta como miembro del Consejo Rector de AEK, mostró orgulloso, brazo en alto, la ikurriña a su llegada al punto final de la supuesta carrera en favor del euskera, donde una edición más se han podido ver decenas de homenajes a los terroristas de ETA.
Gartzia afirmó que esta edición de la Korrika "es otro fruto del cambio" y ha destacado que "ya empezamos a conocer unas transformación fundamental en las políticas a favor del euskera". "Queremos vivir en euskera", ha reivindicado, "los euskaldunes no queremos ser persona subordinadas; no queremos que el mundo llegue a perder el tesoro del euskera".
Asismismo, Garztía (en la imagen con la ikurriña del testigo de la Korrika) reclamó que el euskera "sea lengua oficial, sin relegar a un segundo plano, ni zonificar los derechos de sus habitantes". "Es tiempo de cambios, y los llevaremos a cabo trabajando en equipo: unos haciendo más uso del euskera; otros acercándose a él y aprendiéndolo; y los poderes públicos ofreciendo la protección legal pertinente", ha concluido.
