La Policía Foral ha cerrado la madrugada del sábado al domingo uno de octubre con un total de cinco conductores imputados por distintos delitos de tráfico.
En la NA-5300, a la altura de Olite, un vecino de la localidad de 22 años ha sido detenido por circular sin haber obtenido el permiso de conducción y hacerlo bajo los efectos del speed y cocaína. La policía ha podido darse cuenta de que había consumido sustancias estupefacientes tras realizarle un control en saliva.
Por su parte, en Burutáin (N-121-A) una pamplonesa de 23 años ha sido interceptada realizando un adelantamiento en línea continua y más tarde se ha confirmado que su permiso carecía de puntos. En Tudela, un vecino de 32 años ha sido imputado al cometer una infracción de tráfico y triplicar la tasa de alcohol permitida.
Un vecino de Berriozar de 36 años también ha sido imputado en la PA-30 de Aranguren por un delito de tráfico ya que superaba la tasa de alcohol teniendo dos retiradas de carné previas. El quinto detenido, en Huarte (NA-2306) ha sido un vecino de Burlada de 47 años que cuadruplicaba la cifra de alcohol permitida y que ha sido detectado en un control preventivo.