Un adolescente de 15 años ha sido imputado en Genevilla tras caer del ciclomotor en el que circulaba sin carné de conducir.
El chico ha sido denunciado también por carecer de seguro (1000 euros) e ITV (200 euros), tras acudir al lugar del accidente una patrulla de Policía Foral de Estella a las 02.24 horas.
Además, en Tudela, la Policía Local recibió sobre la una de la madrugada la llamada del responsable de un negocio de hostelería que informaba de que unos jóvenes habían lanzado una silla contra la cristalera de su local y se habían marchado del lugar.
Al llegar la patrulla, el requirente manifestó que los jóvenes le habían lanzado la silla tras recriminarles su actitud por cómo se estaban comportando con otro joven que se encontraba tumbado en el suelo, al parecer influenciado por la ingesta de alcohol.
Al encontrarse los agentes en el lugar, uno de los implicados pasó caminando y fue reconocido por el hostelero, por lo que pudo ser identificado por la policía y confesó que él había sido el autor del lanzamiento de la silla.
Media hora más tarde, el propietario del negocio requirió de nuevo a la policía puesto que el identificado había vuelto de nuevo al lugar y le agredió por haber llamado a la policía.
Tras informarle de las opciones legales de presentar denuncia contra el supuesto agresor, se procedió a recoger una riñonera con documentación personal y un teléfono móvil, propiedad del agresor, que había dejado en el lugar al salir corriendo.
También, sobre las 11.40 horas un ciudadano informó de que había una persona en el suelo en Paseo del Castillo con un golpe en la cabeza y sangrando. La patrulla desplazada al lugar encontró a un hombre de 79 años que se había resbalado en la rampa de acceso a su garaje, había caído al suelo y se había golpeado la cabeza, produciéndose una herida sangrante en la misma. El hombre fue trasladado al hospital en ambulancia.
Algo similar ocurrió a las 19.15 horas, de nuevo una asistencia sanitaria requirió presencia policial, en esta ocasión en el Parque del Queiles, donde una mujer también se había producido una herida sangrante en la cabeza al caer al suelo. Tras requerir una ambulancia, esta trasladó a la herida al hospital.
Por último, a las 20.30 horas, un vecino alertó que en la plaza de San Nicolás había un alero de una vivienda a punto de desprenderse. Tras requerir a bomberos, estos finalmente procedieron a demoler gran parte del tejado, dejando la zona acordonada y dando aviso al propietario para demoler definitivamente el edificio.
