Todo había comenzado con el robo de una bicicleta para poder llegar hasta un camping situado en Tierra Estella y hacer acopio de objetos de valor.
Dejan tras de sí un cúmulo de delitos en varios puntos de Navarra y en tan solo un par de horas.
Un joven de 26 años, natural de Estella, y una mujer de 37 años, nacida en Pamplona, han sido acusados de varios delitos de hurto, allanamiento de morada y un delito de estafa.
El reguero delictivo comenzó en Mendigorría el pasado 28 de mayo, cuando el joven de 26 años robó una bicicleta de marca TPX con la que poder acercarse hasta el camping El Molino.
Una vez en el recinto, el ladrón aprovechó que una autocaravana se encontraba vacía y se coló en su interior para robar los objetos de valor que pudiera encontrar. En este caso aumentó su botín con un móvil de alta gama y una cartera.
Como el detenido no tiene carné de conducir, telefoneó a su compañera de delitos para que pudiera prestarle el coche y encaminarse a Pamplona a vender en una tienda de compraventa de objetos usados el material hurtado.
La mujer de 37 años accedió a formar parte del plan. De hecho, la pareja incurrió en un nuevo delito ya que el joven, a pesar de no tener carné de conducir, fue quien se puso al volante.
A la entrada de Pamplona comenzó a torcerse el guión de los ladrones. La Policía Municipal dio el alto a este vehículo en un control rutinario y el vecino de Estella fue detenido al momento al carecer de licencia para conducir.
Viendo que el botín robado corría peligro, el chico pidió a su compañera que se trasladase a la tienda de compraventa para vender todo lo hurtado, algo que la mujer acabó haciendo.
Ahora la Guardia Civil ha desvelado el plan urdido por la pareja de ladrones, que han sido identificados e investigados en el marco de la operación 'Tendaro 2018', acusados de delitos de hurto, allanamiento de morada y estafa.
