Los vecinos han alertado a la Policía Foral después de que se hubiesen producido en la zona numerosos robos en vehículos.
La Policía Foral ha detenido recientemente a tres personas, dos en Tudela y uno en Ansoáin, por la comisión de varios delitos: uno está acusado de resistencia y desobediencia a la autoridad, otro ha sido detenido por causar lesiones a una tercera persona y el último arrestado estaba en busca y captura por un juzgado andaluz.
En Tudela, los agentes han detenido a un vecino de origen argelino, R.T. de 25 años, después de recibir un aviso en el que se informaba que una persona estaba rompiendo retrovisores y manipulando las puertas de vehículos estacionados en una calle de la capital ribera. Se daba la circunstancia que en los últimos días se habían producido numerosos robos en vehículos.
La patrulla localizó al presunto autor, que emprendió la huida y fue finalmente interceptado, resistiéndose activamente. Una vez finalizada las diligencias fueron remitidas al Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción nº 5 de Tudela, y se le investiga por un presunto delito de resistencia y desobediencia.
UN VECINO DE CORELLA, EN BUSCA Y CAPTURA
También en Tudela, la Policía Foral ha detenido a un vecino de Corella de 26 años sobre el que pesaba una orden de búsqueda, detención y personación dictada por un juzgado de Linares, en relación con un asunto de violencia sobre la mujer. La patrulla dio el alto reglamentario al conductor de un vehículo en un control de alcoholemia que se realizaba en Tudela (N232A). Al comprobar su identidad, desde el Centro de Mando y Coordinación de la Policía Foral se confirmó la requisitoria en vigor.
En Ansoáin, la Policía Municipal ha puesto a disposición de la Policía Foral en calidad de detenido a un vecino de la localidad, D.V.P.H., de 31 años, como presunto autor de un delito de lesiones. Los hechos se produjeron cuando víctima y autor, unidos por cierto grado de parentesco, se encontraban en un domicilio. En un momento dado ambos se enzarzaron en una discusión que terminó con uno de ellos con heridas en la cabeza que precisaron de grapas metálicas para suturar dos heridas incisas. Las diligencias propias del atestado fueron enviadas al Juzgado de Instrucción nº 5 de Pamplona.
